tag:blogger.com,1999:blog-156821262024-03-13T02:54:07.906-04:00Silencios de Papelblog de la escritora puertorriqueña
Ana María Fuster Lavin
--gestión cultural, cuentos, poesía, ensayos, fragmentos de textos y vivencias desde las sombras de una ciudad silente--
“Tengo miedo de mi voz
y busco mi sombra en vano.
¿Será mía aquella sombra
sin cuerpo que va pasando?...”
Xavier Villaurrutia
Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.comBlogger1247125tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-16433556497016358052024-02-23T08:11:00.001-04:002024-02-23T08:11:04.165-04:00Ana María Fuster Lavín-microrrelatos<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/pYv28vB7oBQ" width="320" youtube-src-id="pYv28vB7oBQ"></iframe></div>Lectura para el día internacional de la mujer (8 de marzo),<div>Ana María Fuster Lavín</div><div>Siete microrrelatos del libro inédito</div><div><br /></div><div><b>Habitantes del silencio</b>:</div><div><br /></div><div><i>Las hijas del grito 1</i></div><div><i><br /></i></div><div><i>Las hijas del grito 2</i></div><div><i><br /></i></div><div><i>Habitantes del silencio (preludio)</i></div><div><i><br /></i></div><div><i>El horizonte</i></div><div><i><br /></i></div><div><i>La eternidad de Julia</i></div><div><i><br /></i></div><div><i>El duelo de Penélope</i></div><div><i><br /></i></div><div><i>La casa de la laguna</i></div><div><br /></div><div> </div>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-13830153264369421632024-02-20T13:55:00.001-04:002024-02-20T13:55:08.335-04:00[La espina que florece, el nuevo poemario de Carlos Roberto Gómez Beras]<p> <b>Las espinas de un bosque llamado hombre, llamado Poesía</b></p><p>por Ana María Fuster Lavín</p><p>Escritora puertorriqueña</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEigt12nFM-AF2oig4_pwLNztQAlqNZvFpW8qqo2TA1GEHCGhqtU00kWNabE-9C_KVF9bFejna6dvbWxLwPeCNXgoQlMpRBq0R_tBu6RY7ZCW4OdUSX5UzLgWUaHZtKisZslVptGimazUa320rbNSByX940atHzlcpa7807c5EdM90wS-p7RESYg/s3175/image%20(12).png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="3175" data-original-width="1938" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEigt12nFM-AF2oig4_pwLNztQAlqNZvFpW8qqo2TA1GEHCGhqtU00kWNabE-9C_KVF9bFejna6dvbWxLwPeCNXgoQlMpRBq0R_tBu6RY7ZCW4OdUSX5UzLgWUaHZtKisZslVptGimazUa320rbNSByX940atHzlcpa7807c5EdM90wS-p7RESYg/w244-h400/image%20(12).png" width="244" /></a></div><br /><p><br /></p><p> “Las sílabas nocturnas y los versos blancos / trazaron con símbolos, mientras dormía, / un claro en medio del bosque.” Carlos Roberto Gómez Beras, del poema Bosque, pág. 125</p><p> “La poesía es un intento de aproximación a lo absoluto por medio de los símbolos”, comentó el inolvidable poeta español, radicado y exiliado en Puerto Rico, Juan Ramón Jiménez. Estos símbolos son los recursos poéticos, la selección de vocablos, imágenes, ritmo e, incluso, espiritualidad, misterios y certezas, de lo vivido y leído, de lo sentido y anhelado, y de ese parto etéreo, casi cosmogónico de la creatividad. Así el propio poeta, el laureado escritor y editor caribeño de Isla Negra Editores, Carlos Roberto Gómez Beras, nos reafirma –-en su poemario más reciente La espina que florece (Ed. Isla Negra, 2023), presentado recientemente en la Feria Internacional del Libro de Santo Domingo y ahora en 2024 en San Juan-- que en ese claro del bosque, o luminosidad de la poesía, “están las respuestas a mis rezos, // que no son otras que mis temores // a ser yo mismo lejos de mi derrota” (pág. 125, del mismo poema Bosque, que sirve de espina dorsal del libro, y nos permite construir esta reseña a modo del método de la parte por el todo, en este brevísimo comentario de un poemario hermosamente abarcador, complejo y carente de excesos innecesarios).</p><p>En <b>La espina que florece</b>, el yo, la naturaleza, el amor, y la fe o “dios” se funden en ese abrazo: “donde nos habla en silencio/ y donde todo lo que se ha roto/ vuelve a ser una sola cosa / intocada, sin tiempo, / como una rosa en un poema” (del poema Sueño, pág. 15, a modo de pórtico del libro). Ya desde sus primeros versos de esta bitácora del poeta nos transportan a aquella cita del querido poeta José Hierro: «Soy de los que consideran la poesía como una fe en la vida, [pues] La poesía sirve para decir aquello que no se puede decir». </p><p>Así, a través de sus páginas, las espinas y sus cicatrices brotan desde el universo interior del poeta para deslumbrarnos ante su secreto a punto de florecer. Igualmente, la voz poética nos afirma: “Si los árboles nos abrazan, entonces, el hombre es un bosque” (Bosque, pág. 125); ante lo cual, todos los poemas son piezas fundamentales de su naturaleza humana, terrenal y casi mística. Carlos Roberto Gómez Beras nos invita a este bosque donde somos espectadores hipnotizados y cómplices ante esas raíces líricas que florecen desde las espinas, el corazón y las palabras. Nuestros pasos por sus páginas serán siempre de tres en tres, frente a sus complejidades, defectos y deslumbramiento; frente al enigma de la vida, el corazón, la muerte (en sus distintos significados); recalcamos, todos estos conceptos presentados en triadas. Vida, recuerdo, olvido, pues ya nos escribe el poeta Gómez Beras, “el olvido es una muerte, que nos mantiene vivos” (en el poema Olvido, pág. 19), igual como marchitarse, fecundarse, renacer. O como en el poema Viernes, pág. 41, cuando</p><p><br /></p><p>“La lluvia trae consigo un tiempo</p><p> donde fuimos semilla, rama y hoja.</p><p>El viernes es el día donde mueren</p><p>las bestias, los hombres y los dioses”.</p><p><br /></p><p>En este nuevo poemario, Carlos Roberto versa, además, “el misterio insondable de la belleza” —desde su infinita creatividad y profunda sensibilidad— y nos revela la Trinidad del origen, la esencia, la palabra, dividiendo este poemario en 3 secciones Cielo-Axis-Tierra (o bien pueden ser Dios/el Amor/el Alma). O la trinidad del trabajo del poeta que define en el poema Muerte, pág. 25 como “un oficio hecho de labor, emoción y respeto”, en el que la voz poética se aferra a las palabras, aunque acepte que nombrar o decir puede ser “ingrato”, si no se alcanza igualmente ese hablar sin palabras como en su poema Lenguaje, donde une la Trinidad, Dios-Madre-Comunicación (y esta última en nombrar-silencio-lenguaje), pues “la vida se queda en las palabras /La muerte se marcha en los silencios”. (Voyeur, pág. 33). Otra trilogía, palabra, silencio y la divinidad como mujer, poseen la clave.</p><p>Sí, la divinidad mujer-poesía posee el secreto de la salvación en este poemario a modo del Evangelio del poeta: ese secreto-mujer en la revelación de ese espíritu santo en cuerpo de poesía que canta, suspira, golpea a la puerta, tal como versa al final del poemario en el poema Tres (pág. 139) en el que esa divinidad o mujer insomne revela:</p><p>“Y así, desde el centro de la noche,</p><p>te llamará el poema.</p><p>Cantará tres veces como un ave. //…”</p><p>Y toda esta mística en La espina que florece es producto de un desarrollo del conocimiento y autoconocimiento humano y literario. Vemos, cómo a través de los años, la poesía de Carlos Roberto Gómez Beras ha transitado desde una macroplenitud universal hacia lo más cercano, una universalidad personal, una contundente madurez radicada en la intimidad del hombre, para culminar en la esencia, en especial desde ese Mapa al corazón del hombre (publicado en 2012) -sin olvidar aquella hermosa Paloma de la plusvalía (1996)- formando con cada poemario (Erratas de la fe (2015) Sólo el naufragio (2018), Aposento (2019), Un largo suspiro (2021), Inventario (2022)) un rompecabezas que esperemos nunca complete, porque la poesía misma es infinita, como la sensibilidad e intelecto de nuestro gran Poeta, con su fuente de energía humana y cósmica en el amor, el acto de amar, pues sabiamente Gómez Beras nos educa a fuerza de versos “Nada es más importante</p><p>que el amor, //ni siquiera la verdad//…//</p><p>El amor es una plenitud</p><p>desconocida como un cielo</p><p>que nos promete una voz</p><p>nacida del prójimo que nos habita</p><p>a nos(otros) mismos (del poema Amar, pág. 55)</p><p> Si ya en su poemario anterior Inventario describió un recuento de su vida, sus oficios y roles humanos, ahora nos seduce e invita a un viaje reflexivo a través de su Evangelio del Poeta, con versos libres de maquillajes metafóricos y desnudos de lugares comunes, pero cargados de un gran estudio, reflexión y contenido semántico. Inventario se puede visualizar claramente como el puente o transición poética, mística, reveladora o invitación a su siguiente poemario, este que presentamos hoy La espina que florece en el poema que cierra, donde culmina en lo que Gómez Beras denomina “aprender a leer la fe de lo que muere” de Inventario donde el poeta versa “Un día, creo que fue el último/decidí hacer algo sagrado”… e inevitablemente a eso “sagrado” que definitivamente nos abre las puertas a La espina que florece.</p><p>Estos nuevos poemas, que “hablan silencios”, pues en la poesía el silencio es la raíz de las palabras, transitan cual parábolas desde la génesis de su fe (en Dios, la Poesía, la esencia universal), hacia el epicentro del hombre (en otra triada: amar, enamorarse, esa Ella), para finalmente arribar a su alma (o su esencia), que florece en nuevas triadas que definen la existencia, sin dar explicaciones, pues la buena literatura es siempre un reto, una flor que surge desde la inmensidad solitaria de la palabra donde el “cuerpo es cicatriz de una caída desde el cielo”.</p><p>El misterio de la Poesía transita en estas páginas, revelándose en una última trilogía Madre- Hijo-Poesía donde el pico del cénit es la madre poeta, mientras que tres veces (en las que no niega como el Pedro bíblico, sino que afirma con amor, fragilidad y humana fortaleza) la voz poética contrasta con su propia orfandad, como ya vimos en su poemario anterior Inventario, en el poema El sueño, pág. 115, donde nos confiesa “Soy huérfano de tantas cosas…”, poemario donde nos presenta una bitácora de su trayectoria humana, de su pasado o recuento de una vida y de su presente a modo de testamento poético contrastando con la atmósfera de La espina que florece, en la cual Carlos Roberto nos ofrece su espíritu, al poeta y al hombre, con sus fragilidades y sus certezas. Así, por ejemplo, se describe “Yo me presiento ser el niño huérfano / que de tus senos rebosantes bebe la nostalgia (pág. 79, del poema Misterio); o bien, en el fundamental poema Axis, pág. 85: “Soy un hijo huérfano de tres padres, / la sangre, el alcohol y la poesía.” Sí, en efecto, otra Trinidad…</p><p>No podemos olvidar nunca a la madre este universo literario… La madre, mencionada diez veces en el poemario, en imágenes llenas de fortaleza y ternura, por ejemplo: “la inmensidad del tiempo,/ así como la mano de una madre /sobre una frente florecida/ de sangre, sudor y lágrimas” (pág. 17, del poema Voz) o “Alguien no usará unas zapatillas, dijimos, /que una madre había defendido de los buitres” (pág. 39, del poema Vigilia), más adelante leemos “Al abrir los ojos el cuerpo / se reencuentra con el alma / así como una madre / se abraza al niño extraviado” (pág. 89, del poema Despertar) . O, entre otra de las alusiones a la figura maternal, está el final del propio poema Bosque:</p><p>“No busqué esta claridad profunda,</p><p>se cerraba y se abría como una pupila</p><p>golpeada por una gota de almizcle. Estaba allí, lo juro,</p><p>desde el instante que rescataba fotos marchitas</p><p>y mi madre muerta me dijo:</p><p>Ven, abrázate y vuela”</p><p>(final del poema “Bosque”)</p><p>Sigamos, volando, leyendo y celebrando entre estas espinas que florecen en la poética de una de las voces más genuinas y destacadas de la literatura caribeña: Carlos Roberto Gómez Beras.</p><p>en</p><p><a href="https://www.islanegra.com/index.php?option=com_virtuemart&view=productdetails&virtuemart_product_id=484&virtuemart_category_id=5&Itemid=7">https://www.islanegra.com/index.php?option=com_virtuemart&view=productdetails&virtuemart_product_id=484&virtuemart_category_id=5&Itemid=7</a></p><p><br /></p><p><br /></p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-35020167444961183422024-02-20T13:09:00.001-04:002024-02-20T13:09:05.656-04:00Memoria de la ansiedad...<div><b><span style="font-size: large;">Regresar</span></b></div><div><b><span style="font-size: large;">–<i>memoria de la ansiedad</i>–</span></b></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgN-VA-Lu0zk06zx2_coKmIW2ona7iFfmyzVPse5thz9tS5oLPnMnN3gVLE1mf9kKe6z_SgpZsdFrWmDBtl3gz8vs9zVG1uFvyEUhIuCzyyb9GPUKWmM868WWhiLN9DglmHApcSQZaKifQjc8uC998AKc8LT4IPcV030a42NOQF9Np9xLV7LVVq/s1904/20240215_171254.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1904" data-original-width="1593" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgN-VA-Lu0zk06zx2_coKmIW2ona7iFfmyzVPse5thz9tS5oLPnMnN3gVLE1mf9kKe6z_SgpZsdFrWmDBtl3gz8vs9zVG1uFvyEUhIuCzyyb9GPUKWmM868WWhiLN9DglmHApcSQZaKifQjc8uC998AKc8LT4IPcV030a42NOQF9Np9xLV7LVVq/w335-h400/20240215_171254.jpg" width="335" /></a></div><br /><div><br /></div><div>no quiero ser silencio</div><div>he vivido una muerte desgarrada</div><div>que se me aferra a la garganta</div><div>en pequeñas agujas sicodélicas</div><div>que me sepultan en mi recámara</div><div>y temo salir aunque lo desee</div><div><br /></div><div>no, no pretendí rechazar invitaciones</div><div>–bueno, tal vez, algunas, varias–</div><div>un rumor doloroso se me atraganta</div><div>léeme, estoy aquí intentando salir</div><div>viva, aunque no me escuchen</div><div><br /></div><div>me observo frente a la palabra</div><div>para fortalecerme de frente</div><div>a esta manía de respirar</div><div>lágrimas ocultas y sombras</div><div>que estallan la soledad</div><div>en cada vena aferrada a mi tronco marchito</div><div>en cada secreto del paralizante temor</div><div>en cada esqueleto apático</div><div>en cada yo</div><div><br /></div><div>soy aposento de ternuras</div><div>resquebrajadas por muecas</div><div>que vienen y van</div><div>como estatuas de terror,</div><div>autoenclaustrada me pierdo</div><div>prefiero salir y ceñirme a historias</div><div>descaradas groseras rabiosas</div><div>aunque mis pisadas se atrofien</div><div>deprimidas quiméricas locas</div><div>–también me dijeron loca–</div><div>mas grito susurros invisibles</div><div>que coagulan la sangre de mi ausencia</div><div><br /></div><div>no quiero ser ausencia</div><div>muero una vida ajena</div><div>que deambula crepúsculos</div><div>recolectando mariposas y flores</div><div>también pequeños sueños</div><div>y soy esa ella también</div><div>que versa puentes azules</div><div>cementerios y callejones</div><div>otras, una esperanza sonreída</div><div><br /></div><div>igual</div><div>quiero ser reposo y caer</div><div>desde mi último sollozo</div><div>hacia estas letras y mi corazón</div><div>abrir las alas bajo la lluvia</div><div>decirle adiós a la ansiedad</div><div>a las mordazas de mi isla</div><div>a las mentiras y atropellos</div><div>al humo de un día tras otro</div><div>y correr, encender la memoria</div><div>desordenada pero decidida</div><div>para parir páginas y encuentros</div><div>aprender a dejar ir despedidas</div><div>atravesar el porvivir de los cuerpos</div><div>olvidar que no se puede arreglar</div><div>lo que ha huido</div><div>y finalmente regresar</div><div>a la que soy</div><div><br /></div><div><b>Ana María Fuster Lavín</b></div><div>Cicatrices de la memoria</div><div>En </div><div><a href="https://www.islanegra.com/index.php?option=com_virtuemart&view=productdetails&virtuemart_product_id=485&virtuemart_category_id=5">https://www.islanegra.com/index.php?option=com_virtuemart&view=productdetails&virtuemart_product_id=485&virtuemart_category_id=5</a></div>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-15459429614377767972024-02-15T11:46:00.002-04:002024-02-15T11:46:14.008-04:00Los ojos del hambre (La niña 1)--de Callejón de los gatos<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/DvP-KbXFZJo" width="320" youtube-src-id="DvP-KbXFZJo"></iframe></div><br /><div><br /></div>lectura del cuento de Ana María Fuster Lavín: <div><b>Los ojos del hambre (la niña 1</b>), del libro <b>Callejón de los gatos</b> (Premio Nacional de Cuentos del PEN Internacional de Puerto Rico, 2023) </div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgmQ2yirxM7i1lnj46mI59DrwaPe3hkZofmEgXn9C7W8tdWUTH3bf4xYR7fUA3-AA0cJD_uvc_GZaPTSMZ67Pe_GLf9Ycs_aQgp6L7iVEMDs_pEHtxvSjaPDnmxmWqO20aqjn1-zWMrLMjOSOv1FWPzMDe3bNHOnkrRBgY5weVBTMU6LbKXygO4/s3024/20231025_151453.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="3024" data-original-width="3024" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgmQ2yirxM7i1lnj46mI59DrwaPe3hkZofmEgXn9C7W8tdWUTH3bf4xYR7fUA3-AA0cJD_uvc_GZaPTSMZ67Pe_GLf9Ycs_aQgp6L7iVEMDs_pEHtxvSjaPDnmxmWqO20aqjn1-zWMrLMjOSOv1FWPzMDe3bNHOnkrRBgY5weVBTMU6LbKXygO4/w400-h400/20231025_151453.jpg" width="400" /></a></div><br /><div><br /><div>disponible en <a href="https://islanegra.com/index.php?option=com_virtuemart&view=productdetails&virtuemart_product_id=460&virtuemart_category_id=3">https://islanegra.com/index.php?option=com_virtuemart&view=productdetails&virtuemart_product_id=460&virtuemart_category_id=3</a></div><div><br /></div><div>#cuentacuentos. #misterio #vampiros</div><div><br /></div></div>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-21933859506664350332024-02-15T11:18:00.002-04:002024-02-15T11:18:42.995-04:00Premios Nacionales en libros de cuentos y microrrelatos<p> Algunos de mis últimos libros premiados...</p><p><b>*[Cuestión de género]-Carnaval de sangre 2</b></p><p><b>(microcuentos, Ed. EDP, 2019)</b></p><p><b>*La marejada de los muertos</b></p><p><b>(microcuentos, Ed. Sangrefría, 2020)</b></p><p><b>*Callejón de los gatos</b></p><p><b>(cuentos, Ed. Isla Negra, 2022)</b></p><p>Muy agradecida por el hermoso apoyo.📖💜🇵🇷</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh_l9_hlKZmMIekrw_2Fga65D-P-2S8MCiaG1Xqt8kBYbfyMxkWWojgHXCfkxKdDGvgbd1lS0Yf3zlY4r2YzkKryomWoerFwukn3JEpfd2TzxdXjpeB-P8a9y2fmN7vlIMdnLHggA6XPWSOWnWmyCHYdG3gOhLc_9-rQPf_4GIjHN2uNB4c3m-i/s1080/FB_IMG_1708010039184.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="829" data-original-width="1080" height="308" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh_l9_hlKZmMIekrw_2Fga65D-P-2S8MCiaG1Xqt8kBYbfyMxkWWojgHXCfkxKdDGvgbd1lS0Yf3zlY4r2YzkKryomWoerFwukn3JEpfd2TzxdXjpeB-P8a9y2fmN7vlIMdnLHggA6XPWSOWnWmyCHYdG3gOhLc_9-rQPf_4GIjHN2uNB4c3m-i/w400-h308/FB_IMG_1708010039184.jpg" width="400" /></a></div><br /><p><br /></p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-87947122823313786302024-02-15T11:12:00.005-04:002024-02-15T11:12:48.905-04:00Microcuento: Retoñar<p> "Retoñar</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSQ26pwq7CJQooPGpK3xU6YjKUKmTGOmHu5ZU6dgpabSxHnZ6SnGgbh31wx28gmZyYWVZlTkKWw0BuRv_HreqJKmVT2RMfIgJ4YksoAbYP6TtjTp4syuPCm-OL4H20H5oq1X1BsMp93YBsf60XEpEmB6XpYb_SnESK0BGPnLxEwYfHC7kyO16W/s1157/FB_IMG_1708009903979.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1157" data-original-width="1080" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSQ26pwq7CJQooPGpK3xU6YjKUKmTGOmHu5ZU6dgpabSxHnZ6SnGgbh31wx28gmZyYWVZlTkKWw0BuRv_HreqJKmVT2RMfIgJ4YksoAbYP6TtjTp4syuPCm-OL4H20H5oq1X1BsMp93YBsf60XEpEmB6XpYb_SnESK0BGPnLxEwYfHC7kyO16W/w374-h400/FB_IMG_1708009903979.jpg" width="374" /></a></div><br /><p><br /></p><p>Me creían muerta, pero conservaba una semilla en la boca. Al abrir mi féretro antes del entierro, mis labios parían una flor y mis pies, raíces." </p><p>--Ana María Fuster Lavín</p><p>Notición🥰📖📚🍷...</p><p> este año finalmente culmina mi trilogía de microrrelatos "Carnaval de sangre" comenzada hace 10 años...: </p><p>—Malditas Palabras —</p><p>(Carnaval de sangre 3) </p><p>microcuentos y minificciones</p><p>2024</p><p> foto por AMFL 🙋🏻♀️ (Lisboa, marzo 2023)</p><p>🤫🤫 no diremos más palabras malditas... hasta que llegue momento😉</p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-5040535694437572542024-02-15T11:11:00.002-04:002024-02-15T11:11:11.661-04:00microrrelato El horizonte<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhF42i2fXcKxXT0itDnvd0j-P7wpuJw-gsVhm5qzbC-O5bOs3t3lJp0prbKVQjMG8OOi4zwknQKzUcukviNWGwPEdZhanxYEYYhcFGaU1HBGT7lzlUS6rslPsPlIvFZj629JKAtlrMLcIbliQ7Gd5WsXmZLsRYKfbTPcuCHW7sy6kRkJUA6JbrX/s1080/FB_IMG_1707921930170.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="810" data-original-width="1080" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhF42i2fXcKxXT0itDnvd0j-P7wpuJw-gsVhm5qzbC-O5bOs3t3lJp0prbKVQjMG8OOi4zwknQKzUcukviNWGwPEdZhanxYEYYhcFGaU1HBGT7lzlUS6rslPsPlIvFZj629JKAtlrMLcIbliQ7Gd5WsXmZLsRYKfbTPcuCHW7sy6kRkJUA6JbrX/w400-h300/FB_IMG_1707921930170.jpg" width="400" /></a></div><br /> El horizonte<p></p><p><br /></p><p> La niña redacta cómo una rayita lejana oscura difumina los gritos de sus adultos, donde el mar devora al cielo junto a otros ruidos aterradores. Sale a caminar. Extiende sus manos, al intentar tocarla, se aleja. Descubre así que, al escribir, el silencio habita en las palabras de su corazón.</p><p>Ana Maria Fuster Lavín</p><p>(foto y microrrelato)</p><p>Habitantes del silencio</p><p>(2022, libro inédito, en espera de hogar...)</p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-59602705995894127762024-01-02T09:37:00.002-04:002024-01-02T09:37:19.092-04:00Cicatrices de la memoria<p> “[…]‘Cicatrices de la memoria’ es un arpa de nervios en que cada cuerda dice ¡ay!, quejido que nos contagia y nos convoca a la solidaridad por tratarse de un ataque letal a la fibra humana que compartimos. El texto se erige sobre un abecedario cómodo por rutinario, accesible, como alfombra tendida sobre el abismo del dolor, invitándonos al vacío cubierto. A esa trampa, adormecidos, llegamos; sobre ella, nos plantamos y, por propio peso, caemos. La múltiple incertidumbre de un ser en busca de definición, que –en su afán inquisitivo– va soltando preguntas como piedrecillas al fondo incierto de ciertas estrofas o que se empeña en rasgar líneas en papel para acariciar las heridas selladas del recuerdo, jamás se soluciona. Lo suponemos, pero nos adentramos voluntariamente a contemplar cómo se cura por medio del trazo aquello que nos infecta como lectores. Ana María Fuster Lavín comulga de nuevo con la angustiosa belleza y el horror de su cosmovisión, y traduce su pensamiento, su experiencia, en navajazos o versos –que significan lo mismo en el diccionario impropio de sus artes oscuras.” </p><p>Carlos Vázquez Cruz ,</p><p> escritor puertorriqueño</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj3z1laqxLeaP9_iWx_H8ANMt_V6TmJtV9Ol4jpcobokZ-GyqU7hU1erikSOonV__fzzFBJWVjfzD-DgMq_COiT_zYeAAe_Y-3Gn9VDVlepirjtXdKadrkbZfOPEkk1R39M1grBTi1OfCvVX2XmgrAaJnF-WaM4f2X5gCIT5Cpzgaz-I0CRHTGt/s1280/Viernes%2026%20de%20enero%20de%202024%207pm.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="1280" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj3z1laqxLeaP9_iWx_H8ANMt_V6TmJtV9Ol4jpcobokZ-GyqU7hU1erikSOonV__fzzFBJWVjfzD-DgMq_COiT_zYeAAe_Y-3Gn9VDVlepirjtXdKadrkbZfOPEkk1R39M1grBTi1OfCvVX2XmgrAaJnF-WaM4f2X5gCIT5Cpzgaz-I0CRHTGt/s320/Viernes%2026%20de%20enero%20de%202024%207pm.jpg" width="320" /></a></div><br /><p><br /></p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-64493590058551169682023-12-29T10:40:00.002-04:002023-12-29T10:40:22.363-04:00Callejón de los gatos, Premio Nacional<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhD_UeBfTRPza4EEltBg22p0Ye-rikqlUW7rA21FZxwPupOtVvLMo0Ul8SYSZYLwQ_ulYH_-Kna7v4oG6gEkwKmaWacD472-8H9DFZJsFsXVtsRrchGTUXnHxo_5UfdEnfiSXPtPtax7UVaQHmJv1oY7RVTtVwamdg2H9nKIODuxwjcPvUb7ZdK/s3024/20231219_150601.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="3024" data-original-width="3024" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhD_UeBfTRPza4EEltBg22p0Ye-rikqlUW7rA21FZxwPupOtVvLMo0Ul8SYSZYLwQ_ulYH_-Kna7v4oG6gEkwKmaWacD472-8H9DFZJsFsXVtsRrchGTUXnHxo_5UfdEnfiSXPtPtax7UVaQHmJv1oY7RVTtVwamdg2H9nKIODuxwjcPvUb7ZdK/w400-h400/20231219_150601.jpg" width="400" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjGRC6lFSP-cPRnuP4ExHPDwoS7Z3phMZN2gzNowDAiG26XhxcBPkQztyJtBmBuUN8zYw8zEknD54q1Se4E4ZiFs_xZg8M30mWwjzq08B5gaNtz9JhbBlKfJWEQh3UAcoZU52jBSI-aOgNH7bacaMg_XYUxIMR2k4F3yOwekDTkP-I1Btv2LL4N/s3024/20231219_150444.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="3024" data-original-width="2419" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjGRC6lFSP-cPRnuP4ExHPDwoS7Z3phMZN2gzNowDAiG26XhxcBPkQztyJtBmBuUN8zYw8zEknD54q1Se4E4ZiFs_xZg8M30mWwjzq08B5gaNtz9JhbBlKfJWEQh3UAcoZU52jBSI-aOgNH7bacaMg_XYUxIMR2k4F3yOwekDTkP-I1Btv2LL4N/w320-h400/20231219_150444.jpg" width="320" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEif1_28-_8edW0-BOl_03zD949PLCXFFR_wDKua3eViJ3BT3qo2o5X8QeWXYoAv9al_4lghlK5oBW6qA4lNDIZDqYOFd1-EIKZSLJEbNZAYK491E6_cH8-idFs0snG9upM5-N_AZjCawa8VBx3vhmp_5XIWjHYtdJwKWwM-2xINwCpAJTNhTtAd/s3024/20231219_150341.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="2361" data-original-width="3024" height="313" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEif1_28-_8edW0-BOl_03zD949PLCXFFR_wDKua3eViJ3BT3qo2o5X8QeWXYoAv9al_4lghlK5oBW6qA4lNDIZDqYOFd1-EIKZSLJEbNZAYK491E6_cH8-idFs0snG9upM5-N_AZjCawa8VBx3vhmp_5XIWjHYtdJwKWwM-2xINwCpAJTNhTtAd/w400-h313/20231219_150341.jpg" width="400" /></a></div><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj2QJmgvdyDxjsG3A8iCyWeQMDCYhvqp9WmtciK51NuNDHDB3YVT03uon-2vCmQsi9UDZtUgMe_PBgbHAhb8IC1HjCbWp_wIxyGDv22BxMA_TfcC86tEraL3w-AK91D-y42D7jm4_-tB1NEpporcs-kexcFoZq3bFgrufYSXTmeCEu4PEwsyA7f/s3024/20231219_150358.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="3024" data-original-width="3024" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj2QJmgvdyDxjsG3A8iCyWeQMDCYhvqp9WmtciK51NuNDHDB3YVT03uon-2vCmQsi9UDZtUgMe_PBgbHAhb8IC1HjCbWp_wIxyGDv22BxMA_TfcC86tEraL3w-AK91D-y42D7jm4_-tB1NEpporcs-kexcFoZq3bFgrufYSXTmeCEu4PEwsyA7f/w400-h400/20231219_150358.jpg" width="400" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEge8J1w1diKKtVMI3YLKgEpVZDFG0iy796jreX2oxp9bSiayd39WTDTB0kcplTO8eiUn5J39qFEICaad45RxluVsruA0FYuudfzqRCYVQGvAQzdZtdth8_OTwLjk45DJGeQa-0gvmB0KzP78g1qOA0c8T7E2HWsjrGKQIslLm-EIGs426LCSpR0/s3024/20231219_150341.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="2361" data-original-width="3024" height="250" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEge8J1w1diKKtVMI3YLKgEpVZDFG0iy796jreX2oxp9bSiayd39WTDTB0kcplTO8eiUn5J39qFEICaad45RxluVsruA0FYuudfzqRCYVQGvAQzdZtdth8_OTwLjk45DJGeQa-0gvmB0KzP78g1qOA0c8T7E2HWsjrGKQIslLm-EIGs426LCSpR0/s320/20231219_150341.jpg" width="320" /></a></div><br /><p></p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-42792158548935165162023-12-17T08:28:00.006-04:002023-12-17T09:08:29.474-04:00Callejón de los gatos, Premio Nacional del PEN de Puerto Rico Internacional<p> </p><p><b><span style="font-size: large;">Premio Nacional de Cuento PEN de Puerto Rico Internacional</span></b></p><p><b>Laudo</b></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhlbGjc4fIWf7mvoF1ECfGc1lDltsaOZ0PENxM77dFyu3IhFBPskzbTEewk6KSdXnaRQva6iDK7tDUTKx-GZRZU7iJ2jn41W1pHMbU2DFqTT7cVlNy7cTVf_AQb-x4DDNX3PHYMPoumLRIT-J6RMAQ9_ycT3CJnxOsM_TOOy4xWMFi4-PHeiHjZ/s960/FB_IMG_1697908806959.jpg" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="960" data-original-width="741" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhlbGjc4fIWf7mvoF1ECfGc1lDltsaOZ0PENxM77dFyu3IhFBPskzbTEewk6KSdXnaRQva6iDK7tDUTKx-GZRZU7iJ2jn41W1pHMbU2DFqTT7cVlNy7cTVf_AQb-x4DDNX3PHYMPoumLRIT-J6RMAQ9_ycT3CJnxOsM_TOOy4xWMFi4-PHeiHjZ/w309-h400/FB_IMG_1697908806959.jpg" width="309" /></a></div><br /><p><br /></p><p> El ser humano es un conglomerado de sentimientos diversos. En general, enarbolamos al amor, la paz y la seguridad como preseas intrínsecas a la vida. Sin embargo, la realidad es que, los colores que pintan nuestra personalidad, tienen un espectro de grises que pocas veces reconocemos. Precisamente, sobre las sombras de un ente, se construye el libro ganador del Premio Nacional de Cuento. El libro premiado posee un balance impactante entre la amplia gama de emociones que caracteriza la realidad de nuestro diario vivir. Además, las historias expuestas están confeccionadas con una prosa exquisita caracterizada por un manejo efectivo y notable de una prosa poética que amortigua el carácter sórdido de algunos de los relatos. El paisaje que el autor pinta se nutre de elementos de todo tipo. Resaltan algunos personajes del lumpen quienes irrumpen como figuras estáticas que la sociedad parece no ver.</p><p> La enigmática figura de los gatos se abalanza sobre el lector como un leitmotiv sinuoso de misterio. Estas criaturas son testigos de las peripecias que sufren los personajes. Aparecen en los puntos culminantes y nos acompañan en silencio hasta el final del texto. La muerte, el insomnio, la soledad, la desesperación y la falta de esperanza hacen que repasemos muchas de nuestras noches para interpolar las sensaciones que sentimos en determinados momentos de nuestras vidas.</p><p> Por la elección deliciosa del vocabulario, por un trabajo ortotipográfico innovador y el uso del misticismo del felino más querido para custodiar las historias sobrecogedoras que componen el texto, el jurado de la categoría Cuento otorga el Premio Nacional de Cuento al libro El callejón de los gatos, de la escritora puertorriqueña Ana María Fuster Lavín.</p><p><br /></p><p>Menciones de Honor: Oscar Ortega por "No estoy muerto", y Luis Saldaña por Camino de imperf(i)cción</p><p> Jurado:</p><p>Emilio del Carril</p><p>Marimar Méndez</p><p>Urayoán Enrique</p><p>Callejón de los gatos, disponible para la venta escribiendo a <a href="mailto:fusterlavin@gmail.com">fusterlavin@gmail.com</a></p><p>y en</p><p> <a href="https://islanegra.com/index.php?option=com_virtuemart&view=productdetails&virtuemart_product_id=460&virtuemart_category_id=3">https://islanegra.com/index.php?option=com_virtuemart&view=productdetails&virtuemart_product_id=460&virtuemart_category_id=3</a></p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-17233086025184028822023-11-15T14:39:00.003-04:002023-11-15T14:39:35.028-04:00Obra literaria Ana María Fuster Lavín 2023<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen='allowfullscreen' webkitallowfullscreen='webkitallowfullscreen' mozallowfullscreen='mozallowfullscreen' width='320' height='266' src='https://www.blogger.com/video.g?token=AD6v5dzl0D-c7plbsf1lUram_YXN8aCjD86i-uPp9P9PwplQIyR0nsD52ytZ9ZnddVqB-YcET6Anc8gHB4c' class='b-hbp-video b-uploaded' frameborder='0'></iframe></div><br />
<p></p><p>Ana María Fuster Lavín.
</p><p>San Juan, Puerto Rico, 1967. Graduada de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras. Escritora, editora, correctora de textos y correctora legal (en el Tribunal Supremo de Puerto Rico), redactora de textos escolares y columnista de prensa cultural, también fue maestra de español y de música. Ha recibido diversos premios en los géneros de ensayo, cuento, microcuento y poesía. Su canal literario de YouTube es Mariposas Negras y su blog http://bocetosdeselene.blogspot.com/. Ha participado presencialmente en lecturas y performance de narrativa y poesía en Puerto Rico, México, España, Estados Unidos, Portugal y República Dominicana (además, virtualmente en distintos países). Su obra aparece publicada en diversas revistas y antologías en Puerto Rico e internacionalmente con traducciones al francés, portugués, italiano, inglés.</p><p> Libros de cuentos:</p><p> Verdades caprichosas (Ed. de autor, 2001), Mención de honor Instituto de Literatura Puertorriqueña; </p><p>Réquiem (Isla Negra, 2005), 2do Lugar PEN Club Puerto Rico; </p><p>Leyendas de misterio (Alfaguara Infantil, 2006); </p><p>Bocetos de una ciudad silente (Isla Negra, 2007); </p><p>Callejón de los gatos (Isla Negra, 2022).
</p><p>Poemarios: </p><p>El libro de las sombras (Isla Negra, 2006), Mención de honor Instituto de Literatura Puertorriqueña; </p><p>El cuerpo del delito (Diosa Blanca, 2009);</p><p> El Eróscopo: daños colaterales de la poesía (Isla Negra, 2010); </p><p>Tras la sombra de la Luna (Casa de los Poetas, 2011); </p><p>Última estación, Necrópolis (Aguadulce, 2018), </p><p>Al otro lado, el puente (Isla Negra, 2018);</p><p> Muro azul silencio (Letras salvajes, 2022),</p><p> Cicatrices de la memoria (Isla Negra, 2023).
</p><p>Novelas: </p><p>(In)somnio (Isla Negra, 2012), </p><p>Mariposas negras (Isla Negra, 2016).
</p><p>Libros de Microcuentos: </p><p>Carnaval de sangre (EDP University, 2015); </p><p>[Cuestión de género], Carnaval de sangre 2 (EDP University, 2019) Premio Nacional del PEN Internacional de Puerto Rico </p><p>La marejada de los muertos y otras pandemias (Sangrefría, 2020), Premio Nacional del PEN Internacional de Puerto Rico.
</p><p><br /></p><p>
</p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-44521778997744592082023-10-12T11:02:00.006-04:002023-10-12T11:02:52.501-04:00Reseña de Cicatrices de la memoria por Lala González Rodríguez<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhMptJkuIXSfUr8C8SYvqBL28hgN_v0LLFNXmobfFV0RIBIqh6qj9_FxV0Xq5aJXu0MsYKm1h49uAX7vnyk2vP0khlwc3n1BnXilv2e4IiW7RQVEZo9y1ybHW9xdiOGnOv8peHVLn-h1QfoK8msisDY3F01eXAbJ7FOk729bWtE_he1Hdb4U3kD/s2116/20231001_182249.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="2116" data-original-width="1394" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhMptJkuIXSfUr8C8SYvqBL28hgN_v0LLFNXmobfFV0RIBIqh6qj9_FxV0Xq5aJXu0MsYKm1h49uAX7vnyk2vP0khlwc3n1BnXilv2e4IiW7RQVEZo9y1ybHW9xdiOGnOv8peHVLn-h1QfoK8msisDY3F01eXAbJ7FOk729bWtE_he1Hdb4U3kD/s320/20231001_182249.jpg" width="211" /></a></div><br /> Gracias a la querida poeta puertorriqueña Lala González-Rodríguez por su hermosa reseña del poemario Cicatrices de la memoria:<p></p><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p><p>"<b><span style="font-size: large;">Cicatrices de la memoria; un canto a la melancolía</span></b></p><p><b><span style="font-size: large;">Por: Lala González Rodríguez </span></b></p><p><br /></p><p>Sentada en mi sala con una taza de café, termino de releer Cicatrices de la memoria, de la prolífica escritora puertorriqueña Ana Maria Fuster Lavin . No he cerrado bien el libro pues aún siento en mi piel cada golpe de melancolía trazado por el alma de la autora, es como si sus cicatrices emergieran en mi piel. Estos cuarenta y ocho poemas divididos en tres partes son un canto a la melancolía en todas sus dimensiones.</p><p>Este maravilloso libro es un manifiesto al existencialismo. Las preguntas no contestadas de la poeta me llevan a cuestionarme: ¿soy? ¿fui? ¿seré?. Me llevan a cuestionar mis propias grietas/dolores/ausencias. Es verme en ese espejo roto de su propia existencia. </p><p>Ana María nos tiene acostumbrados a su vulnerabilidad, este nostálgico poemario no es la excepción. La poeta tiene una forma única de abrirse a sus lectores. Ella mira de frente a la vida/muerte sin temores y deja plasmada cada palabra de manera mágica y magistral llevándonos al nirvana. </p><p>Cicatrices de la memoria es un libro que habrá de cambiar la manera de ver/vivir la nostalgia. Está plasmado de figuras sensoriales muy bien logradas y sus metáforas son impresionantes. Indiscutiblemente es una joya literaria que no debe faltar en ninguna mesa de noche."</p><p><br /></p><p>Pd. poemario disponible en algunas librerías de Puerto Rico, en www.islanegra.com o escribiendo a fusterlavin@gmail.com</p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-72605014021257415222023-10-12T10:57:00.000-04:002023-10-12T10:57:58.713-04:00Último viaje, poema<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen='allowfullscreen' webkitallowfullscreen='webkitallowfullscreen' mozallowfullscreen='mozallowfullscreen' width='320' height='266' src='https://www.blogger.com/video.g?token=AD6v5dwHLlIZlLTvtqfcvSjvIvB8WOwMDqDu-rdJItytUPG5FSdA9CxEykMB3dZYFoPTuqb1vRKgU6ltanI' class='b-hbp-video b-uploaded' frameborder='0'></iframe></div><br /> <p></p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-29011876449665348112023-08-19T08:50:00.000-04:002023-08-19T08:50:04.074-04:00Cicatrices de la memoria, en la FIL dominicana 2023<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgFnAV7XTrfl0xsxoX8xVgALM0kgtQ8hIIT83Ud6_B1k8lu3ReJV7YYm6UWtWf7N4Lv3NGJxARVG00OgviS7BKrzqy3LZ-TWxDCawEkpUjxYGMTsSdPJ7iyHmJBnTDhMVmr-k_G3gN8-UzScxs1kNA3oewZx-rnYMv-GPPQlHZog8ossmR_sRl5/s2169/Screenshot_20230818_112758_Acrobat%20for%20Samsung.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="2169" height="318" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgFnAV7XTrfl0xsxoX8xVgALM0kgtQ8hIIT83Ud6_B1k8lu3ReJV7YYm6UWtWf7N4Lv3NGJxARVG00OgviS7BKrzqy3LZ-TWxDCawEkpUjxYGMTsSdPJ7iyHmJBnTDhMVmr-k_G3gN8-UzScxs1kNA3oewZx-rnYMv-GPPQlHZog8ossmR_sRl5/w640-h318/Screenshot_20230818_112758_Acrobat%20for%20Samsung.jpg" width="640" /></a></div><br /><p></p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-25556979978327939662023-05-31T08:19:00.003-04:002023-05-31T08:19:55.556-04:00Horror cotidiano y el inframundo sobrenatural Reseña Callejón de los Gatos<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghsZqk_Nsh8s1J1wV6xowcIhrrVE3dfZJRapriSMWdnCOw_49CIkfapLFTYZGVTgKhdaViNcTNqe6vaQtCa2FiB6rM2bqz42hChRl7aOk1pE9pix2sTITZSLt1kVX5jB5psjdYt7xH7hTrQLih3yik0xc5clPBadXM-jMPn7FDV9hetN3c4Q/s1080/FB_IMG_1685535028726.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1080" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghsZqk_Nsh8s1J1wV6xowcIhrrVE3dfZJRapriSMWdnCOw_49CIkfapLFTYZGVTgKhdaViNcTNqe6vaQtCa2FiB6rM2bqz42hChRl7aOk1pE9pix2sTITZSLt1kVX5jB5psjdYt7xH7hTrQLih3yik0xc5clPBadXM-jMPn7FDV9hetN3c4Q/s320/FB_IMG_1685535028726.jpg" width="320" /></a></div><br /> <b>Callejón de los gatos</b><p></p><p><b>Ana Maria Fuster Lavin </b></p><p><b>Isla Negra Editores, 2022</b></p><p><i>Horror cotidiano y el inframundo sobrenatural</i></p><p><i>por Gloria María Toro Agrait "Getea"</i></p><p><i>publicado en FB </i></p><p>"Callejón de los gatos es mucho más que el título de un libro que contiene 19 cuentos. La autora nos lleva con sus palabras entre el horror cotidiano y el inframundo sobrenatural de forma tal que durante la lectura olvidé las fronteras y me dejé guiar. Todo lo sentí metáfora real y tangible. </p><p><br /></p><p>Su lenguaje descriptivo no abandona el lirismo poético que embellece con la palabra hasta lo más macabro. Mis cuentos favoritos fueron Sonrisa de medianoche y Al otro lado del silencio [la resistencia]. El primero, como varios más en el libro, toca el tema de la violencia de género con matices surrealistas. El segundo se me antoja distopía apocalíptica. Los cuatro cuentos de la niña me inspiran una ternura infinita en un escenario que para muchos podría resultar grotesco. </p><p><br /></p><p>La lectura me tomó tiempo, necesité dejar que los cuentos se asentaran en mi psiquis. Al menos a mi me pareció un thriller psicológico. Mientras se avanza en la lectura los personajes entran y salen de cada cuento. Sin alterar el protagonismo de cada uno en el cuento al que pertenece.</p><p>En fin, el callejón de los gatos es un universo para visibilizar la tragedia de estar vivo en un mundo que muchos prefieren ignorar. </p><p><br /></p><p>No es un libro para estómagos delicados ni el que busca mero entretenimiento. Estos cuentos estremecen, crean conciencia y nos recuerdan que la tragedia es parte del día a día."</p><p>Por</p><p><span style="font-size: large;"><b>"Getea"</b></span></p><p><span style="font-size: large;"><b> Gloria María Toro-Agrait</b></span></p><p><span style="font-size: large;"><b>escritora puertorriqueña</b></span></p><p><br /></p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-42498130128641901602023-04-18T11:14:00.003-04:002023-04-18T11:14:50.942-04:00Festival Internacional de Poesía <p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi82CgzYFkJmrYI6sg7CpDzg73Esr32iBTceEwHMXJd66WuUAoYm-9xQ31j2nATwwFZufsH_PwNWI7jjYs8HMsWDlZ1TMfm_fJT6l709R0rLP46QYPDJiyHEqlvYXsTSL2_TGr25Sdl10LTL9oM8J9tnG6mo7AH3aRDmTVqSJc8cpLhxpwT9g/s1260/FB_IMG_1681825414302.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1260" data-original-width="828" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi82CgzYFkJmrYI6sg7CpDzg73Esr32iBTceEwHMXJd66WuUAoYm-9xQ31j2nATwwFZufsH_PwNWI7jjYs8HMsWDlZ1TMfm_fJT6l709R0rLP46QYPDJiyHEqlvYXsTSL2_TGr25Sdl10LTL9oM8J9tnG6mo7AH3aRDmTVqSJc8cpLhxpwT9g/s320/FB_IMG_1681825414302.jpg" width="210" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhklEeGhnU7M8msmXezlTwTCcmGtCqeVWGm2Mnd_0Ht8rBoMjHHPM3BFzj6cpmfTFEUc7ExQpZxvfECi0f_XcAuT2Zh8xJFBj3b3YPrQsyNwu0oyOyEmvIpM9AdgdzFHxJCTtB26g9tme-4knFw7CekxYk0DqqVj_8yMVeqMsgg2Wmpb1ORqA/s1528/FB_IMG_1681825419315.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1528" data-original-width="1080" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhklEeGhnU7M8msmXezlTwTCcmGtCqeVWGm2Mnd_0Ht8rBoMjHHPM3BFzj6cpmfTFEUc7ExQpZxvfECi0f_XcAuT2Zh8xJFBj3b3YPrQsyNwu0oyOyEmvIpM9AdgdzFHxJCTtB26g9tme-4knFw7CekxYk0DqqVj_8yMVeqMsgg2Wmpb1ORqA/w452-h640/FB_IMG_1681825419315.jpg" width="452" /></a></div><br /> <p></p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-19771250385249990872023-04-11T12:45:00.003-04:002023-04-11T12:45:55.067-04:00la rabia desnuda de un grito...<p style="text-align: center;"><b><span style="font-size: large;"> La rabia</span></b></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjWjFhNR9fBaLv3JIPnF8ADO-gQ6ZdQHhYGOoKNBvNhVnEBCk2kIU1CROREvX6AKM3TuRjkM0L-Nrx1Kft6ofK-5Xx0a3l5r6_MvwlBazweclfFK0QgNWyZbrPR_Q-fI3qRUSSajjccX9JM7zj76OPwFwGyLW-f5Gz3gE0AlhzCBYm2e9c8Sg/s1080/FB_IMG_1681231294397.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1080" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjWjFhNR9fBaLv3JIPnF8ADO-gQ6ZdQHhYGOoKNBvNhVnEBCk2kIU1CROREvX6AKM3TuRjkM0L-Nrx1Kft6ofK-5Xx0a3l5r6_MvwlBazweclfFK0QgNWyZbrPR_Q-fI3qRUSSajjccX9JM7zj76OPwFwGyLW-f5Gz3gE0AlhzCBYm2e9c8Sg/w400-h400/FB_IMG_1681231294397.jpg" width="400" /></a></div><br /><p style="text-align: center;"><br /></p><p style="text-align: center;">y si solo</p><p style="text-align: center;">he sido la rabia desnuda de un grito</p><p style="text-align: center;">que logró andar desde la nada</p><p style="text-align: center;">hacia el parto polirrítmico del deseo</p><p style="text-align: center;">de nuevas historias de papel</p><p style="text-align: center;">o de una cicatriz porfiada</p><p style="text-align: center;">que se negó a ser espina</p><p style="text-align: center;">igual, de un recuerdo enjaulado</p><p style="text-align: center;">pero insurrecto</p><p style="text-align: center;">que prefiere ser raíz</p><p style="text-align: center;">de un olvido terco que anhela</p><p style="text-align: center;">beber de aquella sangre</p><p style="text-align: center;">agridulce, esquiva,</p><p style="text-align: center;">que te hace el amor</p><p style="text-align: center;">antes de coagularse en cenizas</p><p style="text-align: center;">poco después de la poesía tocar a la puerta</p><p style="text-align: center;">y fundirse en la música de las palabras:</p><div style="text-align: center;"><br /></div><p style="text-align: center;">soy la sinfonía rabiosa de una mujer</p><p style="text-align: center;">que se niega a callar ante la lápida</p><p style="text-align: center;">de una calma vestida de nada</p><p style="text-align: center;">--</p><p style="text-align: center;">Ana Maria Fuster Lavín</p><p style="text-align: center;">(poema y foto)</p><p style="text-align: center;">Cicatrices de la memoria</p><p style="text-align: center;">(Pronto)</p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-60202203993729468622023-04-05T11:13:00.003-04:002023-04-05T11:13:39.997-04:00Ana María Fuster Lavín<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjGkUiolNA0OuInjZtsTh5vEmHLoj23jeDAbhE-zlyRTQyetX3Nw3-bFHuxPGFykXHAbjcxU53m5gNTC-I_Qqqn1oiACAPXe2f6nUSR0ZImxaAa2c0qPB-OauOJt4v1SEzkyeNZqQtqAHYXumK2z7fT4YrgUE-QnO7XBPy0IFSI_jsAylIXsw/s1280/San%20Juan,%20Puerto%20Rico,%201967.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="1280" height="360" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjGkUiolNA0OuInjZtsTh5vEmHLoj23jeDAbhE-zlyRTQyetX3Nw3-bFHuxPGFykXHAbjcxU53m5gNTC-I_Qqqn1oiACAPXe2f6nUSR0ZImxaAa2c0qPB-OauOJt4v1SEzkyeNZqQtqAHYXumK2z7fT4YrgUE-QnO7XBPy0IFSI_jsAylIXsw/w640-h360/San%20Juan,%20Puerto%20Rico,%201967.jpg" width="640" /></a></div><br /><p></p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-91693714858078971372023-04-05T11:11:00.002-04:002023-04-05T11:11:28.768-04:00Ana María Fuster Lavín breve bibliografía<p style="text-align: center;"> <span style="color: #2b00fe; font-family: trebuchet; font-size: large;"><b>Ana María Fuster Lavín</b></span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #2b00fe; font-family: trebuchet; font-size: large;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="color: #2b00fe; font-family: trebuchet; font-size: large;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgeiGeZsFffEThWcw3TC4wjXV8PlES3QdT6a79SZPqlS7pfw7PXSzwExB_H48Ch2B0hueIB2xxXFIhvikx2C3_AF6nWLJm15NUT4qiVgM29qP0HtneC2mR4fCBybc7XRSs7ISCAbcGn-_CfN3sPX43PnoOXP8dQfdIFptoaPZf-OTrMQ70qCw/s4032/20230405_094444.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="3024" data-original-width="4032" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgeiGeZsFffEThWcw3TC4wjXV8PlES3QdT6a79SZPqlS7pfw7PXSzwExB_H48Ch2B0hueIB2xxXFIhvikx2C3_AF6nWLJm15NUT4qiVgM29qP0HtneC2mR4fCBybc7XRSs7ISCAbcGn-_CfN3sPX43PnoOXP8dQfdIFptoaPZf-OTrMQ70qCw/w400-h300/20230405_094444.jpg" width="400" /></a></span></div><span style="color: #2b00fe; font-family: trebuchet; font-size: large;"><br /><b><br /></b></span><p></p><p><b>San Juan, Puerto Rico, 1967. </b>Escritora, editora, correctora, redactora de textos y columnista cultural. Graduada de Universidad de Puerto Rico-recinto de Río Piedras, con premios en ensayo, cuento, microcuento y poesía. Ha participado en conversatorios, presentaciones de libros y recitales de poesía y narrativa en Puerto Rico e internacionalmente. Ha sido traducida al inglés, italiano, portugués y francés y publicada en diversas antologías y periódicos desde los años 90 como escritora, crítica y editora. </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhpUWM1BzE19Y5jULIakKxeufd3U4tfA9CY6fDtZyxnJ5zHzi_igwhhUUw5Sm9YIb7su9zsfGRKQtjBAR3gESIT_nsCgChHPBPwMrPyGvOf5ZYoaV7f5kmyODVZtpDvVZUSnwyORE35LSzxoiIe8P5A6ODM-cUyOQcg--kTV0dz07H_JZwCNQ/s1710/img1679927050305.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1710" data-original-width="959" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhpUWM1BzE19Y5jULIakKxeufd3U4tfA9CY6fDtZyxnJ5zHzi_igwhhUUw5Sm9YIb7su9zsfGRKQtjBAR3gESIT_nsCgChHPBPwMrPyGvOf5ZYoaV7f5kmyODVZtpDvVZUSnwyORE35LSzxoiIe8P5A6ODM-cUyOQcg--kTV0dz07H_JZwCNQ/w179-h320/img1679927050305.jpg" width="179" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="text-align: left;">🇵🇷Publicaciones de su autoría: Libros de cuentos: </span><b style="text-align: left;">Verdades caprichosas</b><span style="text-align: left;"> (2002), Mención de Honor-Instituto Literatura Puertorriqueña; </span><b style="text-align: left;">Réquiem</b><span style="text-align: left;"> (2005), 2do lugar PEN Club Puerto Rico; </span><b style="text-align: left;">Leyendas de misterio</b><span style="text-align: left;"> (2006); </span><b style="text-align: left;">Bocetos de una ciudad silente </b><span style="text-align: left;">(2007); </span><b style="text-align: left;">Callejón de los gatos</b><span style="text-align: left;"> (2022); // Poemarios: </span><b style="text-align: left;">El libro de las sombras</b><span style="text-align: left;"> (2006), Mención de Honor-Instituto Literatura Puertorriqueña; </span><b style="text-align: left;">El cuerpo del delito</b><span style="text-align: left;"> (2009); </span><b style="text-align: left;">El Eróscopo: daños colaterales de la poesía</b><span style="text-align: left;"> (2010); </span><b style="text-align: left;">Tras la sombra de la Luna</b><span style="text-align: left;"> (2011); </span><b style="text-align: left;">Última estación, Necrópolis</b><span style="text-align: left;"> (2018); </span><b style="text-align: left;">Al otro lado, el puente</b><span style="text-align: left;"> (2018); </span><b style="text-align: left;">Muro Azul Silencio</b><span style="text-align: left;"> (2022), </span><b style="text-align: left;">Necrópolis [retorno a la ciudad de sombras</b><span style="text-align: left;"> (bilingüe, 2022).//Novelas: </span><b style="text-align: left;">(In)somnio</b><span style="text-align: left;"> (2012); </span><b style="text-align: left;">Mariposas negras</b><span style="text-align: left;"> (2016).//Libros de Microcuentos: </span><b style="text-align: left;">Carnaval de sangre</b><span style="text-align: left;"> (2015); </span><b style="text-align: left;">[Cuestión de género]</b><span style="text-align: left;"> (2019) premio Nacional del PEN Internacional-Puerto Rico; </span><b style="text-align: left;">La marejada de los muertos y otras pandemias</b><span style="text-align: left;"> (2020) premio Nacional del PEN Internacional-Puerto Rico.</span></div><div><br /></div>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-26537331179440123622023-04-03T09:22:00.004-04:002023-04-03T09:22:38.291-04:00Recuerdos...<p> Había una vez un pasillo llamado paraíso, llamado hogar... en la Facultad de Humanidades Universidad de Puerto Rico, recinto de Río Piedras en mis recordados 80s... (foto en algún momento de 1986 a 1989)</p><p>Aquí estudiábamos, leíamos (y muuucho), tertuliábamos sueños...libros música cine teatro arte luchas viajes, allí fuimos felices construyendo puentes hacia la esperanza</p><p>Los mejores años... en mi Alma Mater</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjeKDw3GW3SP_qAcj90Bs27MnejS4t5zX8vjUHgYxWHDpAG91PWZIfmwP9c6fJNxAh-OoyPwK9FBzfPZ2RvkHQiIijKlNV9i6itXMAQtI8QGW9-1aUQk3RnXKwwuAdo1_SaC3JRx0vODrW0JkW4PNmoGgEqgXrfSQrkK5-YmzNt0MIh4pxJlQ/s1501/20230401_112034.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1255" data-original-width="1501" height="268" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjeKDw3GW3SP_qAcj90Bs27MnejS4t5zX8vjUHgYxWHDpAG91PWZIfmwP9c6fJNxAh-OoyPwK9FBzfPZ2RvkHQiIijKlNV9i6itXMAQtI8QGW9-1aUQk3RnXKwwuAdo1_SaC3JRx0vODrW0JkW4PNmoGgEqgXrfSQrkK5-YmzNt0MIh4pxJlQ/s320/20230401_112034.jpg" width="320" /></a></div><br /><p><br /></p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-20748535911417351182023-03-31T10:55:00.002-04:002023-03-31T10:55:55.968-04:00Libros disponibles...<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgU1LtdAvOtkGZ0ZeBfHByaB9VxLXItinAWZ6svnxiPGDSJ9tY5vjd30S1sTSLWozu20JG-TXjI0GYPS-aFW9PEnqsKAdRxmR7r-NBuutMIwePsOn9mWvt5tLPb7di6Vls3f5gO208CC1nPTlw9oVJIVv3GlWiYr2hp3mrQQ5cIITB_gM-TpA/s1080/FB_IMG_1680274056538.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="700" data-original-width="1080" height="259" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgU1LtdAvOtkGZ0ZeBfHByaB9VxLXItinAWZ6svnxiPGDSJ9tY5vjd30S1sTSLWozu20JG-TXjI0GYPS-aFW9PEnqsKAdRxmR7r-NBuutMIwePsOn9mWvt5tLPb7di6Vls3f5gO208CC1nPTlw9oVJIVv3GlWiYr2hp3mrQQ5cIITB_gM-TpA/w400-h259/FB_IMG_1680274056538.jpg" width="400" /></a></div><br /> Mis dos querendones Mariposas negras (novela) y Callejón de los gatos (cuentos)... emparentados.<p></p><p>Salieron rumbo a Tenerife, en las Islas Canarias.💜📚</p><p>Otras publicaciones</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgRl2BbwjkayD2VoBH9xgMwryZx4AYMPOyhEU0rmAiEXxEwgaLSTXmGH-NB_3G_n4INh-61bimLupghfqXmO0OZfkr8KVhrb76Yvw8t8BAFhudK0HqvHuuJZIRefp5NmdYt7Z2x-2UVY7WeLztjpNprzbcpJffeo2rg4ZCV1Es75pnldcSnoQ/s1080/FB_IMG_1677926164046.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="648" data-original-width="1080" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgRl2BbwjkayD2VoBH9xgMwryZx4AYMPOyhEU0rmAiEXxEwgaLSTXmGH-NB_3G_n4INh-61bimLupghfqXmO0OZfkr8KVhrb76Yvw8t8BAFhudK0HqvHuuJZIRefp5NmdYt7Z2x-2UVY7WeLztjpNprzbcpJffeo2rg4ZCV1Es75pnldcSnoQ/w400-h240/FB_IMG_1677926164046.jpg" width="400" /></a></div><br /><p><br /></p><p>Tengo ejemplares disponibles para la venta, info a <a href="mailto:fusterlavin@gmail.com">fusterlavin@gmail.com</a></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjP14h-KUPYXQR4fLe8IpszN-ahjTRExeFCKhtXjOtjW-9Ns2NLWS6M3c-qe7oRdnpdJHz6Y4EpDCZqVCD8Z4ot9SRS7Kqej_yN33DfeD9gd93h-mT7-rp2nQT88simypXOXyIAR3sG-rsCIIaDDDM5-6-bKCfwY_2jylIR6d8u1jENqk9aFw/s3204/20220809_152820.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="3204" data-original-width="2268" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjP14h-KUPYXQR4fLe8IpszN-ahjTRExeFCKhtXjOtjW-9Ns2NLWS6M3c-qe7oRdnpdJHz6Y4EpDCZqVCD8Z4ot9SRS7Kqej_yN33DfeD9gd93h-mT7-rp2nQT88simypXOXyIAR3sG-rsCIIaDDDM5-6-bKCfwY_2jylIR6d8u1jENqk9aFw/s320/20220809_152820.jpg" width="227" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiibgSOkrVcAdU2vaJsWfGD1-xWbGD6YlY3_shpa-mqZaGPXSqu46PhHNZSHfe-7O5bJGw52eW06mqPepOXQO7IFmmZtKye8jEq4TqNfwRxENHBasTMpIeaN5Y_dAjyj5lQ_BMdlCfft7Az8TqhOVI-hRqrxRbRNiObIQXxdaAEdbseeVFj8g/s3997/20220809_153225.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1891" data-original-width="3997" height="151" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiibgSOkrVcAdU2vaJsWfGD1-xWbGD6YlY3_shpa-mqZaGPXSqu46PhHNZSHfe-7O5bJGw52eW06mqPepOXQO7IFmmZtKye8jEq4TqNfwRxENHBasTMpIeaN5Y_dAjyj5lQ_BMdlCfft7Az8TqhOVI-hRqrxRbRNiObIQXxdaAEdbseeVFj8g/s320/20220809_153225.jpg" width="320" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhKEMaUG3ha-37InV-tDH7V0MIo4F2EtHSR8tCj-NkyalZ_PWP8Dk1Uac7apkvUV2nwKGQT4QFArlrs4BabvVGkS4_46vb03HsYsPnw-GPI6ff3p4jC4otpoDui2NBDyoFOtDm76BruFJEHblaQ1ZmbXLwvIP4uXp6h1IXyf1Pan7mXcbhfzQ/s4032/20221026_094049.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="4032" data-original-width="2268" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhKEMaUG3ha-37InV-tDH7V0MIo4F2EtHSR8tCj-NkyalZ_PWP8Dk1Uac7apkvUV2nwKGQT4QFArlrs4BabvVGkS4_46vb03HsYsPnw-GPI6ff3p4jC4otpoDui2NBDyoFOtDm76BruFJEHblaQ1ZmbXLwvIP4uXp6h1IXyf1Pan7mXcbhfzQ/s320/20221026_094049.jpg" width="180" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjjEtmQzNhyWOji2tQiCI5sEdwkzMua85lT6Hsln_LbUwKWjZfbHcHZHeezmDNJnVlFb0DLEW6gL4127RBO8DMvXXnCboxPZj9nX71nfuqffhUKx8DqdPSWaoEGOEp89_hYq16OvVEw2fLl_JUwe2aD4VsjbbOFzwASAck3r2ldHGVXzEbDDg/s4032/20221128_132113.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="3024" data-original-width="4032" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjjEtmQzNhyWOji2tQiCI5sEdwkzMua85lT6Hsln_LbUwKWjZfbHcHZHeezmDNJnVlFb0DLEW6gL4127RBO8DMvXXnCboxPZj9nX71nfuqffhUKx8DqdPSWaoEGOEp89_hYq16OvVEw2fLl_JUwe2aD4VsjbbOFzwASAck3r2ldHGVXzEbDDg/s320/20221128_132113.jpg" width="320" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiH9yx4m3mlxo2rPEkV2dl7f6TmOsTy14BLWqIjlDSRTKmLIBrm1tx2fXqxsyp2a3Nmzqo7hg79HBlDc6mUTtE6rfxJNZ1L5zQ8mXYPRxGWKarTPF7tCRF8SOLonzIY9GwFxE6Nii1f7iJRzO6HbakKfFObX7TQSK54gTQx8MVyrX0NRqppuQ/s3094/20221211_140655.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1816" data-original-width="3094" height="188" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiH9yx4m3mlxo2rPEkV2dl7f6TmOsTy14BLWqIjlDSRTKmLIBrm1tx2fXqxsyp2a3Nmzqo7hg79HBlDc6mUTtE6rfxJNZ1L5zQ8mXYPRxGWKarTPF7tCRF8SOLonzIY9GwFxE6Nii1f7iJRzO6HbakKfFObX7TQSK54gTQx8MVyrX0NRqppuQ/s320/20221211_140655.jpg" width="320" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjQQWK6GSiTvutf3Vtb_kSnaHADpUuuYAvdKCq0JZrRNO2gtNNYd-UEaQ_0a4wYSv5wcVOE67XoO-5IzTmvXcbECexdSpFOsD0Z9KAbYGVWEw-n8hymj57AWk295Np5AZz_NMgYKBj047D76XS2hGucQXtX1jEI37McS_wsam0H2V4mtXi8kQ/s2198/20221211_164744.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1812" data-original-width="2198" height="264" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjQQWK6GSiTvutf3Vtb_kSnaHADpUuuYAvdKCq0JZrRNO2gtNNYd-UEaQ_0a4wYSv5wcVOE67XoO-5IzTmvXcbECexdSpFOsD0Z9KAbYGVWEw-n8hymj57AWk295Np5AZz_NMgYKBj047D76XS2hGucQXtX1jEI37McS_wsam0H2V4mtXi8kQ/s320/20221211_164744.jpg" width="320" /></a></div><br /><p><br /></p><p><br /></p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-92042260863771089012023-03-31T09:59:00.001-04:002023-03-31T09:59:28.448-04:00Resucitar, poema Ana María Fuster Lavín<p> <span style="font-size: large;"><b>Resucitar</b></span></p><p><br /></p><p> <i><span style="font-size: x-small;"> “La poesía es un cuerpo resucitado</span></i></p><p><i><span style="font-size: x-small;"> que habla en silencio y metáforas”</span></i></p><p><i><span style="font-size: x-small;"> --Carlos Roberto Gómez Beras</span></i></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhKHTte-8DDYnJ3EYNOyQg0GDFek9trhjFm_gg4YYBaNY7xZqw5AYlDg_VxDahT9LzAx4PUVZwQBl308D41OCCa0V1r4NNuIJJ2JHwt7TUpxT7giWSOemiI5P__rN25Q1bGLi46ozGbywgkp_TkJKCkU4kW9L3RVazty9lau6aBVtyyeROxJA/s1189/FB_IMG_1680270856723.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1189" data-original-width="1080" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhKHTte-8DDYnJ3EYNOyQg0GDFek9trhjFm_gg4YYBaNY7xZqw5AYlDg_VxDahT9LzAx4PUVZwQBl308D41OCCa0V1r4NNuIJJ2JHwt7TUpxT7giWSOemiI5P__rN25Q1bGLi46ozGbywgkp_TkJKCkU4kW9L3RVazty9lau6aBVtyyeROxJA/s320/FB_IMG_1680270856723.jpg" width="291" /></a></div><br /><p><br /></p><p>y si</p><p>muero,</p><p>en esta esquina,</p><p>de verbos filosos</p><p>y mudos</p><p>que amputan pisadas</p><p>puentes y manos</p><p>deshojándome</p><p>libro a libro</p><p>hasta fragmentarme</p><p>--sin nuestra fruta preferida,</p><p>sin sílabas ni personajes--</p><p>en un torpe balbucear</p><p>eclipsado de lágrimas</p><p>página a página</p><p>borradas desmembradas</p><p>como mi propia piel de papel</p><p>pero no quiero dolerme</p><p>ni llorarme</p><p>ni implorar a esas voces</p><p>que zigzaguean inquietas</p><p>dentro de mí</p><p><br /></p><p>y si</p><p>muero de pie</p><p>como los árboles</p><p>sin tiempo para huir</p><p>ni para visitas</p><p>claro, inevitablemente</p><p>echaré de menos</p><p>aquellos versos</p><p>de mi memoria</p><p>también de la nuestra</p><p>mientras</p><p>observo mi sangre</p><p>caer al vacío</p><p>entre mis sombras</p><p>sin despedidas</p><p>-o, tal vez, demasiadas-</p><p>como ese ayer</p><p>en el que desvestí</p><p>mi isla</p><p>y desiertas ambas</p><p>resucitamos</p><p>un rompecabezas</p><p>de recuerdos</p><p>hasta finalmente</p><p>arrojarnos sin miedo</p><p>al otro lado del silencio</p><p>o de la poesía</p><p><br /></p><p>y si</p><p>ya he fallecido</p><p>pero me resisto</p><p>--invisible metáfora--</p><p>inquebrantable</p><p>como cuando sobreviví,</p><p>criando sola a mi hijo</p><p>a veces,</p><p>sin suficientes adjetivos,</p><p>o al abandono y sus farsas</p><p>al cáncer hambriento de mí</p><p>a la muerte de una hija</p><p>mientras yo, sin saberlo,</p><p>me refugiaba de mí misma</p><p>frente al espejo de palabras</p><p>que se resistían a ser simple registro</p><p>de mis desgracias y pasiones</p><p><br /></p><p>y si</p><p>al morir</p><p>río aliviada</p><p>quizás reconociendo</p><p>que finalmente acabo de renacer</p><p>alcanzando la fe de mis cicatrices</p><p>sola y desnuda de lo vivido,</p><p>en esta inesperada paz</p><p>--donde ya no permanece</p><p>aquel vértigo y sus temores--</p><p>donde he aprendido</p><p>a caminar entre pálpitos</p><p>como confeti al viento</p><p>a escribir nuevas certezas</p><p>que te quedaste</p><p>que me quedé</p><p>cuando ya todo estaba perdido</p><p>pero permanece intacto</p><p>en el sabor de las acerolas</p><p>y sus raíces</p><p><br /></p><p>y si</p><p>solo renací</p><p>de mi fortaleza</p><p>de reescribir mi destino</p><p>entre historias y metáforas</p><p>como el poema</p><p>que nace, palpita</p><p>crece desde nuestra fe</p><p>en el misterio de sentir</p><p>y luego fluye libre</p><p>hacia el final de otro callejón</p><p>y antes de perderlo de vista</p><p>nos dice adiós</p><p><br /></p><p> Ana Maria Fuster Lavin </p><p>Cicatrices de la memoria</p><p>2024</p><p>(foto por AMFL en el Cemitério dos Prazeres, Lisboa)</p><p>#DiaMundialDeLaPoesia</p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-60287996910108576642023-03-31T09:23:00.004-04:002023-03-31T09:23:41.038-04:00Ser locura... Cicatrices de la memoria<p> <b><span style="font-size: large;">Ser locura</span></b></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjLCThIeDpOWNXKiwMAChUb7XEz7gC9FbSgvmZaZX9N473WYo_vGcqZ4CTFIKJQ_NUFL_OIWahOQ7saV9kn7yAAaiRfBgNYoyf8j-y39Oe2f8lWKc0IzRGDdliiSDlk42AfgG2xB-7PQA3SVwhF5F_cr4rPwq2FJy7R88cceCOEEnENkg_ZVg/s746/FB_IMG_1680268827300.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="746" data-original-width="746" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjLCThIeDpOWNXKiwMAChUb7XEz7gC9FbSgvmZaZX9N473WYo_vGcqZ4CTFIKJQ_NUFL_OIWahOQ7saV9kn7yAAaiRfBgNYoyf8j-y39Oe2f8lWKc0IzRGDdliiSDlk42AfgG2xB-7PQA3SVwhF5F_cr4rPwq2FJy7R88cceCOEEnENkg_ZVg/s320/FB_IMG_1680268827300.jpg" width="320" /></a></div><br /><p><br /></p><p>a borbotones </p><p>mi corazón</p><p>mis canas y piel</p><p>brotan el magma ardiente</p><p>de todas mis voces</p><p>de estas manos inquietas</p><p><br /></p><p>y aun calcinada de mí misma</p><p>el poema me guía y abraza</p><p><br /></p><p>¿soy acaso esa locura</p><p> que me ríe y me llora?</p><p><br /></p><p><b>Ana Maria Fuster Lavin </b></p><p><b>Cicatrices de la memoria</b></p><p>2023</p><p>Foto por AMFL</p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-3609979746162664352023-03-31T09:18:00.002-04:002023-03-31T09:18:50.461-04:00Habitantes del silencio...<p><b><span style="font-family: verdana; font-size: large;"> Testimonios de una pequeña hambrienta</span></b></p><p><br /></p><p>El sabor de la carne cosquillea mis manos y tripita, haciéndome reír satisfecha. Antes de regresar a casa, arrojo las sobras humanas a los gatos del callejón. Si se entera mamá me regaña. Está prohibido comerse a menores de cincuenta años, también reír o llorar en la calle. Igualmente me reprenderá porque salí sola, que es peligroso, y aun soy una niña. Una niña hambrienta. Dice que así fue como desaparecieron los humanos puros, y luego muchas de las réplicas, creadas a falta de suficientes nacidos. Luego llegamos las primeras mutantes o réplicas evolucionadas como explicaba el doctor que me cuidó en mis primeros años.</p><p>El hambre es todo. No me importa ser diferente. Quienes pretenden protegernos, mienten. Temen mi hambre. Solo les obligan a la reproducción masiva y descartan a quienes incumplan los estándares del Código Moral. No me pueden culpar del exterminio, aunque mami me castigará. La mayoría no ha muerto por una pequeña caníbal hambrienta, sino por las ejecuciones a quienes desobedecen este Nuevo Régimen. Mamá dice que no me harán nada por no ser réplica, pues ambas somos las primeras dos mutantes.</p><p> Ahora, soy la única viva. No pude evitar comérmela antes de su regaño.</p><p>--</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgvSJhX_5XD5cRstQvc9X8yHlAboXXzxgK1iIxy-QZ9wHeyvhHyH3shgMHvBJDKhtziLF7lxORE__5BEyBTJgyUbg-W_SPwkux7TbjKdbAcvD08lpLxctZ708IOygUT7r5uzSDCa35POvX3Lwr-WjOMEibuXw1xhF-D22ePVSxQoi_xWCmejw/s1404/FB_IMG_1680268509083.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1404" data-original-width="1080" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgvSJhX_5XD5cRstQvc9X8yHlAboXXzxgK1iIxy-QZ9wHeyvhHyH3shgMHvBJDKhtziLF7lxORE__5BEyBTJgyUbg-W_SPwkux7TbjKdbAcvD08lpLxctZ708IOygUT7r5uzSDCa35POvX3Lwr-WjOMEibuXw1xhF-D22ePVSxQoi_xWCmejw/s320/FB_IMG_1680268509083.jpg" width="246" /></a></div><br /><p><br /></p><p>Ana Maria Fuster Lavín</p><p>Habitantes del silencio</p><p>microcuentos y minificciones</p><p>(2023 o 2024)</p><p>*gato "oportino", foto AMFL</p>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-15682126.post-34350638407211330722023-03-31T08:56:00.001-04:002023-03-31T08:56:21.527-04:00Somos voces perdidas en el espejismo de la memoria<p><b style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">En el laberinto del olvido</span></b></p><div class="mail-message expanded" id="m#msg-a:r6544174810762765612" style="font-family: sans-serif; font-size: 12.8px;"><div class="mail-message-content collapsible zoom-normal mail-show-images " style="margin: 16px 0px; overflow-wrap: break-word; user-select: auto; width: 307.137px;"><div class="clear"><div dir="ltr"><div data-smartmail="gmail_signature" dir="ltr"><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;"> </span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEguB94rkqtFGfqOXEpp6d5A6XsVf7qXzER57vAZkSlT8cNAgNTmoeb6PxLlETrH6d_bE9Ej2tHpVsllJGPpZSZdRm0dAmsrAPnQB53bRaxeCIpPQP1mEljmwTSQHYG04Yg8rSj9zT9IcNMNdAeoj2YAVXVUcLg3ya7cXNDXz9ijLSlb7N077w/s1244/Screenshot_20230331_085315_Facebook.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1244" data-original-width="1080" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEguB94rkqtFGfqOXEpp6d5A6XsVf7qXzER57vAZkSlT8cNAgNTmoeb6PxLlETrH6d_bE9Ej2tHpVsllJGPpZSZdRm0dAmsrAPnQB53bRaxeCIpPQP1mEljmwTSQHYG04Yg8rSj9zT9IcNMNdAeoj2YAVXVUcLg3ya7cXNDXz9ijLSlb7N077w/s320/Screenshot_20230331_085315_Facebook.jpg" width="278" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><i><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">Somos voces perdidas en el espejismo de la memoria</span></i><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">, meditaba José frente al espejo del baño. <i>Voces entrelazadas, confundidas en el calendario. Somos la llave de la despedida final.</i> Se observa en su propia voz de adolescente enamorado y asustado. Está tan nervioso que los revolcones intestinales lo llevan más de tres veces casi corridas al inodoro. El trono, como le decía abuelo Manolo. Aún no daba crédito a su osadía: esconder aquella cartita cursi, con torpes metáforas, en el bulto de Bequi. Al principio le pareció una idea brillante, ahora estaba literalmente “cagaíto”. Por lo que, en la mañana siguiente, ideó cómo inventarse una enfermedad para evadir la escuela. El drama fue infructuoso, puesto que aun así su abuelo lo obligó a ir a clases.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Cheíto. ¡El poema es tuyo, a que sí!</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― ¿Qué poema Bequita? —le contestó José abochornado con su rostro ardientemente entomatado.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― “Niña de rizos achocolatados/risa de gatita que canta en las noches/quisiera dormir mis besos en tus labios/hasta convertirme en gato y brincar el muro junto a ti” ― le leyó Rebeca, en voz tan alta y emocionada, que todos en la cancha rieron.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;"> </span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">José intentó huir abochornado entre lágrimas, pero Rebeca fue tras él, y le suplicó que volviera a la cancha. Allí frente a todos le obsequió un tímido beso en los labios. Desde ese día los llamaron “los gatitos”. Y José estaba orgulloso de ser todo un gatito enamorado.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;"> </span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: center; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">—0—</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">En ocasiones, a lo largo de su vida, la mente le hacía maldades pasando breves temporadas de angustiosos letargos. Aún estaba consciente de la mayoría de aquellos vaivenes; además, su hija Hortensia y el médico le explicaron, cómo progresará su enfermedad. Unos días observaba su reflejo de viejo cansado y no podía dar crédito de cómo la vida daba esos saltos desde un extremo hasta el otro: joven y viejo, el ayer y el quizá ahora. En ocasiones escuchaba a su mamá, quien había muerto en el parto de su hermanito. El niño murió años después, ya casi adolescente, por una malformación con la que había nacido, aunque en el pueblo dijeron que había sido asesinado. José solo siguió escuchando a su madre durante dos o tres meses tras su muerte y luego calló para siempre. Sin embargo, el eco de los chillidos y la voz de su hermano nunca lo abandonaron.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;"> José intentaba aferrarse a uno de los dos extremos de la vida, que poco a poco se distanciaban más. Todo menos caer. Por el momento. Allá abajo, en el abismo, solo habitaba el olvido. <i>Solo tenemos que aferrarnos fuerte a alguna de esas voces que fuimos</i>, se repetía en voz alta, hacia la puerta abierta que da a la habitación. <i>Rebeca, has sido siempre mi eterno salvavidas</i>. El viejo recuerda que ella había abandonado su prometedora carrera de voleibolista por él y estudió un grado asociado en enfermería, poco después de nacer la nena.</span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: center; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">—0—</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">Aquella hilera de colmillos babeantes acompañada de una respiración filosa llegó a morderle el antebrazo izquierdo y al tratar de zafarse le alcanzó la muñeca izquierda. Sintió cómo la voz de aquel grotesco preadolescente, extrañamente parecido a él, fue penetrando por sus venas hasta radicarse en su mente. José se dejó caer en la marquesina de su hogar, mientras el riachuelo de sangre bajaba hacia la acera. Al par de minutos el gato de sus vecinos se acercó y comenzó a maullar fuertemente parecido al llanto de un bebé. Fue así como un joven que pasaba en bicicleta volteó la vista y lo vio, llamando de inmediato al 911. </span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">Cuando Rebeca recibió la llamada del hospital se encontraba en el camerino con sus compañeras del equipo escuchando las estrategias de la entrenadora para ganar la semifinal. Además, la acaban de fichar para un equipo en Italia con un buen contrato. Le daría esa buena noticia a su marido cuando llegara a la casa, además tenía dos botellitas de cava para celebrar. La secretaria del coliseo donde se celebraba el evento, le avisó que tenía una llamada urgente en el teléfono de la oficina. De ahí salió veloz al hospital, arrojó por la ventana la carta del equipo italiano y su carrera deportiva.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;"> </span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Cheíto, amor… ¿qué hiciste? Llegué tan pronto pude.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Las voces, Bequita, las voces.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Ven aquí, mi gatito. Abrázate a mí.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;"> </span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">José permaneció unos días en el hospital; luego fue trasladado dos semanas a un sanatorio, donde le brindaron tratamiento para un diagnóstico de depresión. Los medicamentos adormecían aquellas voces y sus apariciones. Le otorgaron una tregua de sanidad, por lo que logró terminar sus estudios y graduarse de abogado. Además, se dedicó a proteger a su mujer y consentirla. Se lo merecía. Y cuando nació Hortensia, intentó ser el mejor padre.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><i><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">Hay secretos en el fondo de la memoria, que no deben ser recordados. Son esos recuerdos los que el huracán de los años se encarga de volarlos lejos, pero están allí entre los escombros.</span></i><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;"> Sin embargo, su esposa no le permitía que estuviera mucho tiempo solo con la nena, no fuera que tuviera uno de esos bajones depresivos o le contara sobre las voces o fuese a hacer alguna locura. Ella conocía la historia del preadolescente muerto en la casa abandonada. Aquel hermanito de Cheíto, que la familia mantenía oculto, por vergüenza. Todos en el pueblo decían que tenía la cara de un demonio, con dientes afilados y gritaba poseído. Un día apareció degollado. Beca nunca le confesó sus sospechas a José.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― ¿Me escuchas, Bequita?</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Sí, viejo loco.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― ¿Recuerdas cómo nos decían en la escuela?</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Sí. Ven gatito, léeme uno de tus poemas, ― le gritó la anciana desde la cama, con una tos ahogada e interminable.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Viejita, estás ardiendo.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Me tomé un <i>tecito</i> de manzanilla y dos pastillitas de paracetamol—dijo con dificultad, por la tos.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Viejita, que ya no eres enfermera, hay que buscar ayuda. ¿Qué te pasa? Respira, amor, respira suave…</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><i><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;"> </span></i></p><p align="center" class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: center; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">—0—</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Papi, soy Hortensia, me acaban de llamar del hospital. Es mami…</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Ella está aquí, dormidita.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― No, papi. Recuerda, el hospital.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― ¿Cómo así? Tu mami se jubiló del hospital hace como 15 años.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Intenta recordar. Ella está con COVID desde hace casi un mes. Papi, la pandemia.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Lo que digas—José observa la cama vacía y comienza a llorar.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Papi, tranquilo. Recuerda lo que dijo el doctor. El Alzheimer… Pero escúchame. Te busco en cuanto amanezca. Mami está bien malita. Tenemos que despedirnos.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Lo sé, nena… no aguanto más. Mi mente es una pesadilla.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― No llores, papi. Ustedes han sido los mejores padres.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Es que nunca te contamos, tu madre y yo. Siempre he tenido un demonio en mi mente. Y no es el <i>alemán</i> este.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Ahora no… Mami ya no está respondiendo a los tratamientos. Papi, reacciona.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Bequita me ayuda a silenciarlo. Es mi hermano, cuando murió se metió en mí.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― ¿De qué hablas? Papi, tranquilo.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Yo fui quien lo mató. Tuve que hacerlo.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Mami se nos muere.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Sin ella no hubiera podido pasar la reválida. Mañana voy a corte por primera vez.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Reacciona. Eso fue hace décadas.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― La buscaré tempranito. Daremos un paseo hasta la charca. Le pediré que se case conmigo.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Papi, date un bañito. Tómate las pastillas. Te recojo en cuanto amanezca para ir al hospital.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― …no soy un niño. Me baño si quiero. Dile a abuelo, que no voy a ir a la casa abandonada. Allí vive el demonio.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Papi, por favor. Cuenta hasta veinte, toma las pastillas y el bañito. Voy para allá, pero con el toque de queda voy a tardar un poquito más.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Solo somos voces, unas cosechan poesía para llenar de luz los recuerdos; otras son abismos que nos jalan hacia el olvido; también somos silencios, esos me llevan a ella… Tú me entiendes Rebequita.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Soy Hortensia...</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Que te bendiga, mijita…― José colgó el teléfono y danzando se dirigió al baño.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;"> </span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">Se mira al espejo y se ve deformado. El grito que sale de este es tan estridente que el cristal se craquea. <i>Es hora, es ho ra, esssss hoooo raaaa. O te vaaaaaas con ella, o con mi gooo</i>. Es hora, repite el viejo, es hora, es hora… Se echa agua en el rostro, toma sus medicamentos y cuenta hasta veinte. Se vuelve a echar agua y repite el conteo.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">“Respira profundo”, “lávate la cara”, “cierra el grifo”, “cuando hagas caquita, baja la cadena”. El viejo comenzó a reír entre lágrimas, desprendiendo los papelitos con esos mensajes que había pegado su mujer en la pared del baño. Le llamaba capsulitas para la memoria.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Ven, gatito, mañana todo va a estar bien.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">Escucha la voz de la esposa desde la cama, se acuesta junto a ella. Despierta por el timbre del teléfono. Al darse cuenta de que está solo, comienza a llorar, un lastimoso llanto de bebé. Vuelve a sonar el teléfono, es Hortensia para avisarle que ya está de camino, que llegará como en media hora, pero cuando intenta responder solo gime.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">― Papi, no te entiendo, no cuelgues.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">José no le hizo caso. Colgó el teléfono al escuchar golpes en la puerta de entrada, con aquel ritmo particular, que usaba ella cuando eran novios, a modo de código secreto.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><i><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">¡Rebeca, regresaste! … Claro, amor, me voy contigo.</span></i></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt; text-align: justify; text-indent: 0.5in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">José abrió la puerta. Ella lo abrazó y se fue con ella. Ambos, convertidos nuevamente en aquellos gatitos enamorados se arrojaron al laberinto del olvido.</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in 0in 8pt;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;"> </span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiQummNEaus_umW2OrGdR0Y23CUnMqow8zYbPM5b95gKCW94xMSbYV94ZqUVw0CLqmWsXGDuAn6ljUrzTzagbltHmhpkw9kIde5uwyTOub62YMf0-CV8F4nZwFoDdLfbCI7qTtdTZE2VhqXV34q5cD985wvWZnRq6PVJA7cbQmwBPa5B8nBHw/s746/20230305_103647.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="524" data-original-width="746" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiQummNEaus_umW2OrGdR0Y23CUnMqow8zYbPM5b95gKCW94xMSbYV94ZqUVw0CLqmWsXGDuAn6ljUrzTzagbltHmhpkw9kIde5uwyTOub62YMf0-CV8F4nZwFoDdLfbCI7qTtdTZE2VhqXV34q5cD985wvWZnRq6PVJA7cbQmwBPa5B8nBHw/s320/20230305_103647.jpg" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">Ana María Fuster Lavín</span></p><p class="MsoNormal" style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 11pt; line-height: normal; margin: 0in;"><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">Callejón de los gatos</span></p><span style="font-family: Garamond, serif; font-size: 12pt;">(Ed. Isla Negra)</span> </div><div data-smartmail="gmail_signature" dir="ltr">Foto Ana Maria Fuster Lavin</div><div data-smartmail="gmail_signature" dir="ltr"><a data-saferedirecturl="https://www.google.com/url?q=https://islanegra.com/index.php?option%3Dcom_virtuemart%26view%3Dproductdetails%26virtuemart_product_id%3D460%26virtuemart_category_id%3D3&source=gmail&ust=1680353321971000&usg=AOvVaw1AUinWLOz5WfPIBnJ7Nm6y" href="https://islanegra.com/index.php?option=com_virtuemart&view=productdetails&virtuemart_product_id=460&virtuemart_category_id=3" rel="noreferrer" style="color: #4285f4; text-decoration-line: none;" target="_blank">https://islanegra.com/index.<wbr></wbr>php?option=com_virtuemart&<wbr></wbr>view=productdetails&<wbr></wbr>virtuemart_product_id=460&<wbr></wbr>virtuemart_category_id=3</a><br /></div><div data-smartmail="gmail_signature" dir="ltr"><br /></div></div></div></div><div class="mail-message-footer spacer collapsible" style="height: 0px;"></div></div>Ana María Fuster Lavinhttp://www.blogger.com/profile/10071143139148602544noreply@blogger.com0