jueves, abril 27, 2006

Poema: Ecuación para estos momentos--por Carlos Esteban Cana, poeta invitado



Ecuación para estos momentos


Permita el Universo la bendición
infinita del Kairos, y esta babel
que nos arropa ceda ante la mirada
primigenia y entusiasta de los niños.

He visto al pájaro carpintero
picotear con alegría el fondo
de la barca que habitamos.

¿Por qué La Gracia Divina
nos instala con Virgilio, El Poeta,
y resulta imposible el sueño?

¿Acaso liberamos un Karma Colectivo
y pagamos una pasada arrogancia
que desata estas fuerzas del destino?

Permita el Universo la bendición
infinita, necesaria, del Kairos.
Mirada Primigenia, Entusiasta.
Vigía, Esperanza, Oración.



Carlos Esteban Cana
escritor y editor puertorriqueño

6 comentarios:

Ana María Fuster Lavin dijo...

Mi querida amiga Madam,
No sólo se han robado el erario, el fraude gubernamental, sino que se burlan de todo un pueblo y lo usan como Charmin...

Ana María Fuster Lavin dijo...

Ay, Madam querida, lo del síndrome de Estocolmo, no no no... enamorarse del secuestrador imposible en nuestro caso, pero me preocupa un gran sector del ganado electoral... Otro problema es que hemos sido secuestrados a su vez por distintas gangas de desalmados.

Carlos Esteban sigue llenándonos de belleza hasta en los momentos más horrorosos

PEREGRINO dijo...

Desgraciadamente Ana Maria es como dices, nos han usado como su charmin. Se han limpiado con nuestras necedidades, nuestros deseos de un Puerto Rico mejor. Espero que a raiz de esto, el pueblo haya abierto los ojos (que la realidad es que no). El pueblo esta cada cuatro años ejerciendo un poder futil, al no haber neuronas que logren decifrar el mensaje del pueblo. Veo que estamos como dice la cancion de Fiel a la Vega, "un pueblo durmiendo".

Por Carlos Esteban, felicitaciones por ese escrito. Y realmente la Babel logre ceder ante los mas sufridos...los niños

Abdiel Echevarría Cabán dijo...

No es sólo una lucha de testosterona, es una guerra de clanes, tan antiguos como el recuerdo primigenio de los hombres en el mundo. Hay en esta lucha, estrógeno envuelto también.Ciegas están ambas hormonas. El síndrome del secuestrado no aqueja cuando se trata de ciertos sectores. Estas son pequeñas manifestaciones de un pueblo durmiente, que se levanta unas horas para entrar a su letargo nuevamente. Un pueblo que vive evadiendo, en escape, que no se detiene a reflexionar. Es egoísta, un pueblo incapaz de reconocer la miseria que le habita y la que está más adentro en sus corazones. Esto no es una guerra que pueda librarse desde luchas exteriores, es una guerra que se libra desde dentro, una metamorfosis es necesaria, es en ello donde habita nuestra esperanza. Se quejan los maestros y por los maestros, pero nadie se queja por empleados del sector privado que han quedado sesantes durante el cierre masivo de fábricas. A los que les toca trabajar a tiempo parcial para no recibir ningún beneficio marginal, además de la paga. Los que viven en incertidumbrecostante y sin que nadie pueda ofrecerles seguridad alguna, ésos también tenían hijos y hogares que mantener y vivían en mayor pobreza que los empleados públicos y muchos de ellos hacen su agosto debido al clientelismo del sistema partidista. Hay mucho más que reflexionar de este asunto y de la barbarie de nuestro país. Este es sólo un punto de partida.

Ana María Fuster Lavin dijo...

Abdiel, tiraste el dardo en la palabra y diste en el centro de la diana

Anónimo dijo...

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