
Carta para una joven poeta
A Jocelyn Pimentel
El circo tiene sus hormonas y egos
como trovadores sin trapecio y palabra en fuga:
imitación al verbo
invitación a la nada
imprecación a la tinta.
Ignora sus esencias, si el cuerpo no se ofrece
pues lo ofrecido será un abismo sin espejo.
El manual de autoayuda página trece te recomienda:
que sonrías aunque se exilien las calles
ese poeta puede ser malabarista de metáforas,
pero su locura, castrante
su iglesia un salmo en la oferta y demanda de los aplausos
no te encadenasen al vaho de su imagen y semejanza.
Amiga poeta, pasa a la página:
busca tu metáfora malabarista
que tus manos son miradas infinitas;
no hay cárcel para tus alas
como tampoco dueño para tu nombre
eres profundidad de carne, manantial y proverbios
no desveles, los circenses son nómadas,
así como también tú y yo,
que ruja tu palabra aunque huya el cantor:
grita tu verbo auténtico
ningunea invitaciones al clón
la tinta y sangre de tu cuerpo son tu musa
y tienes la palabra.
A Jocelyn Pimentel
El circo tiene sus hormonas y egos
como trovadores sin trapecio y palabra en fuga:
imitación al verbo
invitación a la nada
imprecación a la tinta.
Ignora sus esencias, si el cuerpo no se ofrece
pues lo ofrecido será un abismo sin espejo.
El manual de autoayuda página trece te recomienda:
que sonrías aunque se exilien las calles
ese poeta puede ser malabarista de metáforas,
pero su locura, castrante
su iglesia un salmo en la oferta y demanda de los aplausos
no te encadenasen al vaho de su imagen y semejanza.
Amiga poeta, pasa a la página:
busca tu metáfora malabarista
que tus manos son miradas infinitas;
no hay cárcel para tus alas
como tampoco dueño para tu nombre
eres profundidad de carne, manantial y proverbios
no desveles, los circenses son nómadas,
así como también tú y yo,
que ruja tu palabra aunque huya el cantor:
grita tu verbo auténtico
ningunea invitaciones al clón
la tinta y sangre de tu cuerpo son tu musa
y tienes la palabra.
Ana María Fuster
de
Manual para ser feliz y otros trapecios existenciales
cuadro de Leonardo Da Vinci
WOW!! Tremendo. Me encanto. Por cierto, gracias por tu comentario en mi pagina. Aunque comparado contigo me siento como un loco peleando con molinos, a lo Sancho Pansa. Saludos.
ResponderBorrarmuy bueno, fuerte y descarnado...algo duro...pero un verdadero grito poetico.
ResponderBorrarabrazos!
A mi me encantó, bello como siempre, esto sí es poesía. Ayyyyy, yo quierooo unoooo! Love ya sister.
ResponderBorrarDoble wow... chidas letras. Muy chidas. Hola.
ResponderBorrarmuy bonito, ana maría, un canto a la libertad
ResponderBorrarbeso
amor
turista, gracias, sigue consiguiendo tu pasaje hasta la ciudad silente aquí te recibimos con esa locura quijotesca y una copa de vino, salud!
ResponderBorrarRomy linda, es que la vida es dura, a a veces en vez de una nana necesitamos un grito muy fuerte, gracias... un abrazote
josé cáez, mi hermanito, pues ya mismito va el tuyo...
Cadaver, qué rico, me encantqa escribirle a los seres del más allá.. muy chido, un abrazo
Amor, eso mismo es, un canto a liberarse de muchas sombras
un beso