Ana María Fuster Lavín presentará libro de cuentos Carnaval de sangre
Luego del éxito de su novela (In)somnio (Editorial Isla Negra, 2012), la escritora puertorriqueña Ana María Fuster Lavín (San Juan, 1967) regresa con Carnaval de sangre, compuesto por cincuenta y siete cuentos breves y microcuentos divididos en cuatro secciones cargadas de humor negro que denuncia el lado más oscuro del ser humano (I. Sin ojos: habitantes de la ciudad silente), de erotismo gótico y el mundo del insomnio (II. Bajo la cama); poesía, sensualidad, metaliteratura (III. Carnaval de voces y sueños); finalmente, más humor negro, muerte y una denuncia a la crueldad humana (IV. Los placeres de la muerte).
“Este Carnaval nos somete a la realidad de que la misma gota de sangre puede simbolizar vida o muerte; que el más grande de los miedos es aquel que nos enfrenta a la posibilidad del dolor y a esa sensación que sustituye el bienestar por la agonía”, escribió sobre este libro el doctor Emilio del Carril, escritor y docente puertorriqueño.
“Con un marcado acento poético que la distancia de otros microcuentistas, y un libro integral finamente redactado y conceptualizado, Ana María Fuster Lavín nos empuja hacia una comparsa en la que las máscaras sobran y los instintos se apoderan de nuestra voluntad para hacernos esclavos de nuestra inconsciencia”, continúa Del Carril. “Los microcuentos se entrelazan, fisgonean entre ellos adjetivos, verbos y sustantivos como hilos conectores de una ambientación siniestra. Al final emergen dos consignas: en la vida, el placer y el amor tienen fecha de caducidad, y que la peor pesadilla es perder el potencial de acuñar sueños. Este es un libro perturbador y doloroso que encierra en un castillo de sombras a los protagonistas y al lector”.
Un cuento de Carnaval de sangre
La vida de las palabras
Despierta, ven aquí, ven. Las pequeñas voces en la sangre la quemaban
tanto que despertó. La vida, esta es la vida. Ella abrió los ojos. La
recámara oscura contrastaba con el luminoso amanecer a través de la
sucia ventana. Ven con nosotras, vive. Se levantó de la cama, tropezando
con las botellas de vino vacías, bolitas de papel y libretas de
anotaciones que había por todos lados. La soledad palpitaba palabras y
olor a mugre. Libéranos y vive. Observó la computadora dañada por un
virus. Se tapó los oídos, pero las voces de la sangre gritaban cada vez
más fuerte. Libera nuestras palabras, vive. Agarró un cuchillo y se
cortó las venas de ambas muñecas. Gota a gota sintió la vida de las
palabras. Murió.http://letralia.com/agenda/2015/10/16/ana-maria-fuster-lavin-presentara-libro-de-cuentos-carnaval-de-sangre/#.ViJcKiuPstp
No hay comentarios.:
Publicar un comentario