“Santurce, un
libro mural” (Rafael Trelles y Francisco Font)
reseña-crónica por Ana María Fuster Lavín
“En
el principio fue el mar y los manglares: la sal, el fango y los mosquitos.
Tijeretas y
pelícanos se repartieron en el cielo; los cangrejos se enseñorearon
de la tierra. Después vinieron las gentes cobrizas, quienes primero me
nombraron y se llevaron el nombre con su parcial exterminio. Un puñado de
criollos renegados y muchos negros –esclavizados y libertos pancaribeños–
fueron haciendo de mis colinas su destino. La ermita fue parte, pero la
consagración, muchos años después, fue empeño del capitán Cortijo. Ocurrió 100
años antes de la abolición de la esclavitud: Cangrejos, el primer pueblo
fundado por negros” Francisco Font Acevedo, Crustacea mundi (en un muro cerca
a la iglesia de San Mateo)
Crustacea
mundi
es el origen, como bien podría ser el final de un recorrido, desde San Mateo a Villa
Palmeras, de Barrio Obrero a Miramar. Santurce es un barrio para vivirlo,
soñarlo y hasta llorarlo de nostalgias. Sus calles, edificios y sectores nos seducen desde
la multiplicidad de posibilidades de reconstruirnos, de revivir y rescatar la
historia, la decadencia y sus disparidades; los colores y olores; de la riqueza
y la pobreza. Es tan dolorosamente rico en la diversidad. Es tan generoso en
sus esas historias que nos regala a los escritores y artistas plásticos y
fotográficos que recorremos sus avenidas, calles, callejones…
Ser parte de una comunidad es vivirla, sentirla,
trabajarla, disfrutarla y colaborar de forma creativa todas estas expectativas.
Así fue el sueño del destacado pintor, escultor, performero, fotógrafo, artista
gráfico y autor de diversos trabajos experimentales, el santurcino Rafael Trelles, quien
estuvo desde la década de los 80 ideando un proyecto urbano de imagen y palabra
provocado por la magia y estructura de Rayuela de Julio Cortázar. Se hizo posible al contactar al escritor
Francisco Font Acevedo, autor que escogió Santurce como el lugar idóneo para
este concepto. Así ambos estuvieron varios años diseñando, soñando, con ilusión
y mucha disciplina. Primero los textos de cien palabras, luego las imágenes
(unas en lápices de colores, otras son fotomontajes de arte gráfico,
impresionantes todas), que no describen o ilustran sino conversan y transforman
cada una de las 22 paradas seleccionadas que componen Santurce, un libro mural.
Según lee el comunicado de prensa: “Se trata de un proyecto
pictórico-narrativo de intervención urbana creado por el escritor Francisco
Font Acevedo y el pintor Rafael Trelles en colaboración con el Museo de Arte
Contemporáneo de Puerto Rico (MAC) y su visionaria e incansable directora
Marianne Ramirez Aponte, quien además diseñó el logo de Santurce, un libro
mural. Esta iniciativa invita a residentes y visitantes de Santurce a recorrer
y apreciar el legendario barrio de la capital puertorriqueña mediante la
lectura de veintidós piezas de arte público ubicadas en diferentes puntos de la
ciudad.”
Son 22 obras de arte, 22 textos, 22
arcanos del tarot, plasmados sobre carteles plastificados y atornillados en
distintos muros y vitrinas, que recorren los puntos cardinales de Cangrejos,
recreando mitos, historia, personajes, vida e imaginación a través de los ojos
y manos de ambos artistas puertorriqueños.
Aquí, “…[l]ees una crónica del asombro, un oráculo posible, un homenaje en
dos tiempos. Descuida si no entiendes: el malentendido es ruido inevitable de
la ciudad…” (Font-Acevedo, El reto).
Describe la
página virtual del Museo de Arte de Puerto Rico, la obra del artista visual,
reconocido internacionalmente, su obra “se nutre de referencias tanto a la obra
surrealista de Max Ernst como a la mitología y la literatura universal.
Su pintura, de impecable factura, es un viaje a un mundo esotérico y
fantástico de personajes asombrosos en escenarios oníricos donde se siente la
soledad. Recientemente ha incursionado en el arte público con imágenes
que “dibuja” con manguera a presión sobre el hollín de muros, aceras y otros
espacios, lo cual llama “gráfica urbana”, características que vemos a través de
las obras que componen el libro mural.”. (http://www.mapr.org/es/museo/proa/artista/trelles-rafael)Según
relató el artista Rafi Trelles antes de comenzar el del 17 de febrero de 2018
(en la entrada del proyecto Enlace del Caño Martín Peña donde cerca podemos
disfrutar de tres de los relatos murales).
“Cada una de las piezas recrea en imagen y palabra el imaginario
histórico de Santurce. Nuestra intención con este proyecto es que el peatón
recorra el barrio siguiendo el orden de su predilección, construyendo así su
propia narrativa, su propio libro. De este modo, la lectura del libro y el
recorrido por Santurce resultan en una experiencia interactiva y doblemente
enriquecedora”, afirmó Francisco Font. Autor
rincoeño, nacido en Chicago, pero que ya adoptamos como santurcino ilustre, es
autor de los libros: Caleidoscopio
(Ed. Isla Negra, 2004), cuentos; La
belleza bruta (Ed. Tal Cual, 2008.), cuentos, y la novela La troupe Samsonite (Ed. Folium,
2016), además lo recordamos como crítico de libros para Radio Universidad y la
revista Plural.
“Hartos del mall y la suburbia regresarán a una imaginaria ciudadela.
Con barbas toscas él, tatuada y sin maquillaje ella, ambos –con botas– volverán
sobre los pasos de antepasados desconocidos. A pie y en bicicleta recorrerán
mis calles, pintarán murales, en inglés y español me profesarán una devoción
casi publicitaria. […] Luego, como tantos antes, partirán en busca del próximo
paraíso.” (Font-Acevedo, Los regresados, en la calle Loíza)
Así como retrata visualmente uno,
describe en palabras el otro, dejamos por el momento nuestro ritual de lo
habitual, salimos de nuestro escritorio o galería, o cerramos ese libro que nos
está haciendo viajar desde un sillón ante los arcanos y aunque “Santurce no es
una visa para soñar” (Font. Aquí Leemos la ciudad de la mirada de ambos
artistas, así como leemos nuestras propias vivencias. Así este proyecto nos
invita a entender nuestro Santurce, ese que nos habita, que recorremos cada
día, ese que algunos se han dado la tarea de historiar como el recordado
Fernando Picó. También nos lleva a vislumbrar un futuro para una ciudad de
abandonos, pues es uno de los aspectos de la palabra son la perspectiva de
transformación y permanencia. Viajamos, pues, con esta obra en 22 estaciones,
de forma creativa del mito a la historia, al presente y, por qué no, a un
posible Así nos comenta la narradora y
periodista Ana Teresa Toro:
“Al
recorrer este libro mural, es posible no solo viajar al paso, sino también
asomarse al futuro desde la aguda lectura del presente. Leer un libro es
atreverse a escuchar un oráculo, no seremos los mismos después de atravesar las
historias que en él convergen […] Leer un libro no es otra cosa que una obra
más de la fortuna, porque ni todo el ingenio del mundo […] ni toda la voluntad
de ser un dios que tenga el autor, podrá intervenir o interrumpir el camino
fortuito de esa abstracción absoluta que son las letras y las imágenes cuando
manifiestan el abismo de las historias que nos habitan”. A. T. Toro, “Andar
sobre la hoja”, en catálogo Santurce, un
libro mural, San Juan, Pub. Museo Arte Contemporáneo de Puerto Rico, 2018,
pág. 14
Manglaria es una de las páginas-mural más hermosas, con una impresionante
ilustración de Rafi Trelles, hecha el original a lápiz de color y cuya modelo
es la actriz Dolores Pedro, está localizada a la entrada de la comunidad de la
Parada 27, en la Ponce de León, poco antes de la entrada del proyecto enlace.
Mientras aprecié en el recorrido esta obra, una vendedora de frutas nos vendió
vasos con trozos de sandías y piña. Ciudad, recorrido, arte, comunidad,
prometen a cada paso, en cada momento. Igual me ocurrió el día que visité El Lazareño, en la calle Hipódromo a
unos veinte pies de la intersección con la Ave. Ponce de León, con un dibujo de
uno de los deambulantes ilustres del barrio, cuyo nombre es Julián. Paré a
leerlo y retratarlo, al verme una señora mayor con un impresionante dubie
dubie, paró a leerlo con la misma devoción de una estación del vía crucis
cristiano. Sentí una emoción y empatía (aunque nunca me he hecho una de esas
cosas en el cabello), el arte nos une.
Y es que una de las cartas
triunfadoras de este proyecto es complicidad artística entre Trelles y Font es
evidente no solo al explicar sus obras, aun sin conocerlos se ve la
compenetración de la imagen y la palabra, las interpretaciones de ambos artistas
son dos, son una. Al igual múltiples como las que les damos al observar-leer-sentir.
Así los dos artistas han logrado en sus 22 arcanos sacar de la rutina del ir y
venir rutinero por las calles, a leer, apreciar el arte, a “tener otros
objetivos”, citando al propio Trelles.
Igual tenemos un documental sobre este proyecto filmado y editado por el
cineasta Tito Otero, que no se pueden perder en https://www.youtube.com/watch?v=4-5CMWQ_lP4
Comenta el historiador y escritor
Mario Cancel en su libro Literatura y narrativa puertorriqueña (San
Juan, Ed. Pasadizo, 2007) que “no se hace literatura en el silencio y el
aislamiento. … La escritura es una reescritura abierta, un medio mixto de cosas
que se recogen de una diversidad de lugares, o del reino de lo heterogéneo. …
La alternancia caótica es la regla”. Así
son estas obras para observar y leer, desde la multiplicidad de los habitantes
fundadores como actuales o, tal vez, solo visitantes casuales del barrio
cangrejo.
“Entre el pudor y
el desenfado se equilibran mis amantes clandestinos. […] Solo por la Ashford o
las
inmediaciones de la Laguna los más atrevidos sacaban a pasear el amor de la
mano. A resguardo ha sido su amor pero cada vez menos, pues desde hace
veintitantos años marchan por mis calles en reclamo y celebración de sus
colores. Mía ya es su bandera de arcoíris y mis dominios, uno de sus baluartes”. (Font-Acevedo, El
arcoíris, en la vitrina del emblemático negocio Tía María, Ave. de Diego)
Queda de nosotros recorrer Santurce
en imagen y palabra, cuerpo y sangre de las historias, de sus habitantes y
transeúntes, de sus esplendores e historias ocultas más allá de los juicios
valorativos, más allá de la oferta y la demanda, y de los aburridos sermoneos. Ser
empáticos con todos los personajes que viven en nuestro barrio, escuchar los
latidos de sus sueños, de su ayer, su mañana y, en especial, el hoy (convulso,
incierto, abrumador, también cargado de esperanza y creatividad, al fin de
cuentas estas dos son nuestros arcanos principales). Esta es la palabra-imagen
del dúo Font-Trelles que construye y reconstruye ese lugar llamado Santurce. Así
como nos invita el narrador El reto,
“Agúzate: Santurce vive, Cangrejos aún respira”. Tenemos que seguir tomando
nuestras ciudades y barrios, llenarlos de voces, palabras, artes y así salir de
las sombras de la rutina.
Ana María Fuster
Lavín
escritora
puertorriqueña
residente
en Santurce
Fotos por Miguel
Marín-Fuster y Ana María Fuster Lavín.
Más información en
http://www.santurceunlibromural.com
publicado la
revista Cruce de la Universidad Metropolitana de Puerto Rico, edición de marzo
2017
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