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Anochece
de repente, la ternura
una caricia por la esperanza
una zigzagueante respiración de pliegues
y nos detenemos justo en el intermedio de las esencias
donde somos niños jugando a mamá y papá
penetramos las travesuras riendo
y de repente, la ternura
amanece.
de repente, la ternura
una caricia por la esperanza
una zigzagueante respiración de pliegues
y nos detenemos justo en el intermedio de las esencias
donde somos niños jugando a mamá y papá
penetramos las travesuras riendo
y de repente, la ternura
amanece.
ana maría fuster
1 comentario:
MUY PERO MUY INTENSO...
Angie Mercedes.
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