viernes, diciembre 28, 2012

Nostalgia para el fin del mundo

http://www.elpostantillano.com/pagina-0/creativo/3942-ana-maria-fuster-lavin.html

Nostalgia para el fin del mundo
La memoria es una puta complaciente
Dulce, pero siempre cobra
Con lágrimas
algunas risas
orgasmos reciclados
silencios
de vez en cuando se escapa una nostalgia
pero ¿cómo complacer a la puta memoria
sin pagarle con el tiempo perdido…?

anamariafuster

 

De viajes intergalácticos, telepatía, poesía y música.

 

Entrevista a la escritora puertorriqueña María Juliana Villafañe
“Me faltan veinte años para volver a nacer
regresar a casa
despertar de este sueño
volver a la oscuridad absoluta
a ese lugar
donde solo mi energía me puebla
otras
me acompañan
sin intervenir en mi paz.”
M. J. Villafañe


Una sonrisa, un abrazo y comenzar la charla, que nuestra poeta sanjuanera, residente en Miami como del aire, pronto emprende otro viaje, al Sur o al Norte, cargada de palabras, sueños y siempre con su solidaridad incondicional que la hacen brillar a donde quiera que va. Así, María Juliana Villafañe se mueve entre libros, aviones, música y amistades letradas por todo el mundo. Así también viajan sus escritos, sin detenerse nunca, intensamente líricos, maduros, rítmicos en vuelo libre desde el alma hasta el macrocosmos. Aquí se vale el vaivén de los recuerdos, la soledad, el amor y desamor, y el reafirmación de una vida a plenitud. Libros cargados de sensibilidad y seguridad caracterizan a nuestra apalabrada entrevistada. Quienes nos honramos de ser sus amigos, conocemos su humildad y simpatía, cargada de talento llevan a María Juliana a ser una de nuestras mayores embajadoras apalabradas en el mundo latinoamericano.

lee la entrevista en: http://www.elpostantillano.com/pagina-0/critica-literaria/3924-ana-maria-fuster-lavin.html

ultima campanada

 
Somos
seres del grito
danzando sombras
celulares arrojados por el balcón
números perdidos a fuerza de hastíos
peregrinamos principitos y brujas
rumbo a las lunas llenas y las sábanas
sin doblar la esquina del reloj
que las lenguas se encuentran en la última campanada
antes del año nuevo y la serpiente de agua
antes de marchitarse otra despedida
 
ana maria fuster lavin

lunes, diciembre 10, 2012

a los chiquillos victimas de la guerra...

Palestina
















Llueve sangre sobre los niños en Gaza
Palestina se derrama de fuego
gritos de mujeres valientes sin tierra.
Las religiones son pretexto de odio
cuando la paz se pisotea como a una flor
que ha nacido de miradas ciegas y miedo
¿Cómo manar sueños en la paz amputada?

Llueven niños sobre el miedo y los escombros
y la sociedad de consumo prefiere cambiar el canal
irse de compras en un viernes negro
negros como son los sionismos
oscuros como los dioses del poder
hablen hebreo, inglés, francés o español.
¿Cómo hidratar de esperanzas al mundo?

Llueven treguas falsas sobre los niños
y los pequeños inocentes palestinos/judíos
solo quieren jugar futbol y reír
desayunar leche y tostadas familiares
pero no hay juegos, padres
mucho menos desayuno,
quedan mutilaciones, humo y desconcierto.
¿Cómo darle pan y sosiego a sus corazones?

Llueven niños sobre un mapa desmembrado
un joven palestino vuela su cometa frente a un F-16.
Allí, muere el arrullo de las palomas en Gaza
mueren hombres, mueren sus manos
mueren de muertes
las madres paren muertes
y los niños no ríen, mueren.
¿Cuándo morirán el hambre y la guerra?

texteando versos urbanos para la psicosis malabarista cotidiana

Lee en: http://www.elpostantillano.com/pagina-0/creativo/3705-ana-maria-fuster-lavin.html

Tríptico para la chica del celular
1
Soy la chica del celular
me declaro culpable
proclamo mis crímenes
me arranco la ropa de malabarista
cibernauta de versos perversos
no tengo miedo a las colillas
--que se enfrían en los muslos--
mucho menos a los silencios
--que se endurecen en los labios--
vivo pintando treguas a la rutina
jugando adivinanzas bajo la lluvia
de un sonriente que tal vez se durmió
para despertar cautivo entre mis sábanas
y corre corre corre acariciado de vientos
--inexistente sensibilidad que se hace materia--
mas ante la proclama desaparece la negación,
mientras, texteamos al tiempo de los desencuentros
encontrados frente a un espejo de amaneceres.
Un día besaré la punta de aquellos labios esquivos
para sellar la cofradía, el deseo y las hormonas
sigamos jugando al tiempo sin calendarios
allí estás, aquí estoy, a cada lado del cristal
tu sonrisa se hace lejana y difusa entre las palabras
perverso el recuerdo etílico de tu risa ansiada
ahora me vuelvo a vestir de malabarista:

low-battery.

2
Me desinhibo de los reglamentos
traduzco las rotaciones y traslaciones
arranco las vocales de cada posibilidad
redacto besos perdidos en la pantalla
a veces, texteo los deseos transeúntes
me muevo como reina
según la táctica y estrategia
esperando no ser sacrificada por el rey.
Escribo, luego sueño que existo
rompo esquemas en ritmo de rock
para liberarme entre las sábanas
ese zigzag de la piel y sus treguas
bajo un exsicólogo secuestrado
y explicarle la palidez de mis vergüenzas
o la suprema lujuria de mis manos versantes.
Recargo mi celular mientras duermo,
recibo mensajes extrasensoriales
paso madrugadas perdidas entre letras
despertando junto a un zombi danzarín
que sonríe a sus sueños de fuego
y le lluevo verbos para su descanso
transcribo en silencio en su oasis
libertades inocentes para sus temores.
Recibo envío, recibo envío,
suenan las pisadas, las bocinas
un músico coral, tal vez malabarista,
se cruza en mi camino, otro esquema,
--o el lugar donde estuvo el paraíso--
sigue su camino pero siempre regresa
como el ruido de las cosas al caer
indago su arte de la distorsión,
él sonríe, me habla de códigos
y acaricio su sombra alargándose
como la mirada de los ausentes al partir
esas eternas despedidas de lo irremediable
en consonantes dos puntitos paréntesis.
Solo camino, escribo y voy y vengo,
aunque para él tan solo sea la chica del celular.

3
Llorar improvisando,
de memoria.
¡Llorar todo el insomnio y todo el día!
Oliverio Girondo
Me lluevo de lágrimas,
--alta la probabilidad de inundaciones--
luego me seco por el pasillo,
envío mensajes a un maestro desconocido
(per)versando incertidumbres
--no existen las certidumbres--
aun así, lloro improvisando nuevos insomnios.
Voy llorando alegría y hastíos
irremediablemente, me voy como vengo,
arrojo los miedos desde el balcón
míos, ajenos, de nadie,
las colillas y las últimas gotas de vino
cierro mi ventana y manos al malabarismo.
Soy la chica del celular
me ves, construyes códigos penales
--extrema interferencia neurológica--
no soy quien crees,
muevo mis fichas observando
mi sensibilidad es infinita
construyo apalabrada el camino
y me duelo ante los engaños,
lloro aun más que Oliverio
ante este lado oscuro y cardiaco.
Tampoco soy coleccionista de sábanas
ni de sementerios,
no me conmueve el reciclaje
tampoco recuerdo a mis amantes expirados
y es que lo olvidable no se debe convocar
ni salir de la casa con la ropa sucia.
Innecesariamente amo
maratonistas musicales, ajedrecistas
enmascarados mentalistas
y son tantas las listas,
--es tan complejo amar tu lista--
para un whisky engrafitado de manos
o el duelo de las sonrisas durmientes
quedo seducida hasta el último llanto.
Texteo a la distancia impuesta
--evidente, no recibiré respuesta--
no deseo llorar improvisando
ya lo lloré todo,
lo lloré bien.
Necesariamente sigo mi camino
aún puedo llorar un poco más
al menos queda un mensaje de voz.

Ana María Fuster Lavín
del poemario inédito:
La Malabarista Insomne

Entrevista al narrador y médico puertorriqueño José A. Rabelo

Sueños, fantasía y libros en una ciudad llamada Datovia, así como en Puerto Rico
Entrevista al narrador y médico puertorriqueño José A. Rabelo
“Soy de los que piensa que hay que atrapar al lector a edad temprana para que en el futuro busque las lecturas que más le atraigan. Hoy tenemos muchas distracciones como entretenimiento pero nada como un buen libro para viajar al presente al pasado o al futuro y también a mundos creados por nosotros los escritores (esto es lo más que me satisface, llegar primero a un mundo nuevo, ser un colono o explorador literario).” José A. Rabelo.

Su simpatía, intelecto, mirada penetrante e ilusionada (como si siempre estuviese a punto de descubrir un nuevo misterio) y su magia personal rápido nos cautiva a sumergirnos en su mundo apalabrado, a una Datovia, tierra imaginaria, llena de posibilidades como es el universo de los sueños y la creatividad, ese paralelo entre lo real y la imaginación. Y es que Rabelo no cierra las puertas a todas las posibilidades de cautivar mediante la palabra, dominando la narrativa con el mismo talento que la literatura infanto-juvenil. Humor, intelecto mundos paralelos, ciencia, arte, todo fluye con suma naturalidad en sus escritos y presentaciones en vivo. En fin, escuchar y leer a José A. Rabelo Cartagena nos invita a buscar sus libros y, por supuesto a conocer más de este escritor, quien además es dermatólogo de profesión.
Lee la entrevista en: http://www.elpostantillano.com/pagina-0/critica-literaria/3632-ana-maria-fuster-lavin.html
 

Carta de Mayra Santos Febres denunciando al PNP

Queridas amiga/os:

Me acabo de enterar que el Partido Nuevo Progresista puso en su plataforma que el Festival de la Palabra era iniciativa de ellos. Yo, como no leo plataformas de ningún partido (lo confieso) y voto por candidaturas (cosa que me da un trabajo increíble dilucidar), no me había enterado hasta hoy del asunto. Despieste de escritora, de madre de familia, de mujer que trabaja 3 trabajos (como lo tienen que hacer tantas otras, no me quejo). Espero que no sea demasiado tarde para enmendar mi error y comentar acerca de este particular.

Siempre me pierdo en vericuetos político-partidistas. Aprovecho para confesar que ese juego no es el mio. Yo soy una simple escritora. Hago lo que me toca y desde la trinchera que mejor conozco- que no es la de los partidos políticos . Además, como buena hija de mis tiempos, soy una de esas tantas "desafiliadas" . Pienso que el mundo de hoy es un lugar más complejo que antes, con actantes sociales diversos que responden a necesidades y luchas mucho más detalladas que ya no pueden ser recogidas en una sola plataforma politico- partidista - por lo menos, no en las que tenemos operando. También creo que nos vamos acercando a esa posibilidad; aunque el camino aún se perfila largo y el proceso lento. Me gustan más las alianzas que los sectarismos. Siento mucho si mis convicciones políticas y existenciales afectan la manera en que se percibe el Festival de la Palabra.

Praactico mi ideología y no es ningún secreto. Cualquiera que ha leído alguna vez mis antiguas columnas del períodico en Nuevo Dia, o mi blog personal,"lugarmanigua" o mis entradas en el blog de Radio Isla, o mis columnas en el diario español El Pais, sabe cuál es. Soy y siempre seré anti-racista, pro-derechos gay, pro-derecho de los niños y de las mujeres( a fin de cuentas, soy una mujer con dos niños), puertorriqueñista, pero de cuño internacionalista e iberoamericano (que no de un nacionalismo cerrado), pro-- derecho de los trabajadores que se ganan dia a dia el pan con el sudor de su frente y que defienden sus derechos al trabajo bien remunerado. No creo en la anexión (ni con Obama, y eso es grande). No creo en los excesos del mantengo y ni del componte político.Tampoco creo en la colonia. Soy meritócrata- creo que los puestos administrativos deben ejercerse por mérito y no simplemente por alianzas ideológicas. Defiendo los derechos de los inmigrantes- de todos- los de los ilegales también- y me hermano y siempre defenderé a los boricuas de la diáspora que se consideran puertorriqueños, hablen el idioma que hablen y residan en el país que residan. Pero sobretodo creo en que personas de diferentes ideologías pueden trabajar juntas por una causa común. No voy a insultar, atacar violentamente, a desestimar ni a ensuciar el nombre, el trabajo ni la dignidad de NADIE simplemente porque no creen en lo mismo en que creo. Estoy dispuesta a caminar el larguísimo y turbulento camino de la negociación y el respeto a la libertad de pensamiento, antes que pisotear a mis supuestos "oponentes". Quien quiera involucrarme en la dinámica del insulto, la violencia, los dimes y diretes recibirá como respuesta mi silencio.

No he trabajado tanto como para degradarme de esa manera.

Obviamente, esto en lo que creo es una utopía social (y existencial) y posiblemente un absurdo para el ejercicio del poder. Pero Dios no le dio alas a los alacranes. Aclaro, soy una simple escritora. Y ya lo dijo Borges- la literatura es un sueño dirigido. En lo que soy buena es en el ejercicio de la ensoñación; en visualizar otras realidades y ponerlas a funcionar en este plano; bien sea a través de Festivales o de novelas, cuentos, poemas o ensayos. Puedo hacer que todos soñemos un mismo sueño, al menos por unos días. Mi ídolo simpre ha sido Scheherezade.

Sin embargo, una cosa me consuela: una vez, en estas tierras, la libertad de los esclavos y el sufragio universal fueron considerados disparates políticos. El derecho a la educación universal también fue considerado un imposible. Y mírenme dónde estoy simplemente porque aprendí a leer y a escribir ; a imaginar y actuar. Y como yo, tantos otro/as. A ver, ¿quien nos quita lo bailado. ¿Quien me quita lo que he leído, lo que he aprendido?

Puedo soñar con el mundo en el cual quiero vivir; el cual le quiero legar a mis hijos y a mi pueblo. Puedo trabajar para que se haga realidad. Quizás estoy equivocada en mis metas; en mis convicciones. No me importa. Ya se encargará la Historia de hacer realidad lo que se merezca mi pueblo. La vida es sabia. Confío en ella. Yo tan solo debo hacer lo que me toca.



Ejerzo y exijo el espacio para ejecutar esta libertad de criterio y esta capacidad de imaginación. Muchos han muerto para que yo pueda gozar de ella. Muchos han luchado por siglos para que yo goce de ese derecho ; todos los "yo" que se reunen en este cuerpo- el yo mujer, el yo negra, el yo puertorriqueña, el yo madre, el yo intelectual, el yo maestra, el yo escritora. Es un milagro que pueda gozar de esta libertad. No pienso vendérsela a nadie, ni comprometerla con nada; con ninguna ideología. Muchos han ofredado su vida para que yo pueda decir ésto ahora. No los defraudaré.

El trabajo social, cultural y educativo que me he impuesto (con mucha alegría y satisfacción, debo aclarar) lo llevo a cabo por puro convencimiento. Creo en mi país y en su grandeza. Tengo que creer; es mi naturaleza y mi necesidad. Por eso trabajo como trabajo; porque estoy confiada en que Puerto Rico puede ser un lugar de encuentro para diálogos de corte internacional. Necesitamos un foro grande para poder expresar nuestra grandeza. La constante pelea acerca del status, la identidad, el poder político-partidista no son campo suficiente grande para desarrollarnos a la medida de nuestras posibilidades.

Por eso desarrollé, junto a mi Junta de Directores y un diverso equipo de trabajo nacional e internacional , el Festival de la Palabra. En nuestras reuniones se dan cita gente de todas las ideologías, religiones, razas, profesiones, caminos políticos y privados. A todos nos une el mismo ideal. Creemos en Puerto Rico y amamos su literatura.


El Festival de la Palabra no es iniciativa de ningún partido. Es el producto de un sinnúmero de escritores, miembros de junta y profesionales que representan diversos sectores de la sociedad (universidades, asociaciones sin fines de lucro, filántropos, abogados, médicos, ingenieros, relacionistas públicos, escritores, estudiantes. etc) y de decenas de voluntarios que creen que Puerto Rico se merece acceso a la palabra y a la literatura como medio de expresión y alimento para el desarrollo de su intelecto y de su educación. El Festival de la Palabra es del pueblo de Puerto Rico y se hace con el dinero del pueblo de Puerto Rico, con ayudas internacionales de consulados y ministerios de cultura y con el apoyo de negociantes, instituciones públicas y privadas, universidades, departamentos y colegiaturas nacionales e internacionales. Como su Directora Ejecutiva, trabajaré para asegurar su futuro crecimiento y me le acercaré a la administración que esté al mando y por la que vote, en libre ejercicio de sus derechos, el pueblo al que sirvo y por el cual trabajo desde mis diversas ocupaciones- como escritora, como profesora universitaria, como gestora cultural y como cuidadana. No tengo que estar de acuerdo con la ideología de la administración que elija el pueblo, ni afiliada con el partido al mando.

El Festival, ciertamente, no lo está.

Las administraciones vigentes decidirán si quieren apoyarnos o no. Ellos determinarán si se puede o no volver a celebrar el Festival de la Palabra. No yo. Yo tan solo debo hacer lo que me toca.

Esta no es la primera vez que identifiquen al Festival de la Palabra con un partido político, ni será la última. Así es el clima público en este país. Obliga a abanderamientos in útiles, enanos. A ser o rojo o azul, y punto. Los que somos de otros colores (de tantos como son los colores y matices de las palabras) estamos constantemente bajo , nos vemos forzados a tener que aclarar nuestra posición una y otra vez. Así que lo hacemos, una y otra vez.

Lo que importa es el país y su gente. Lo que importa es proveerles lo que necesitan. El deber de un gobierno es servirle a su país. Los fondos que ese gobierno administra deben funcionar para el bien del país. No son los fondos de un partido, de una administración, sino de un país. Es responsabilidad civil velar por el buen uso de esos dineros; demandar que se utilicen para lo que se necesita. Algunos luchan por ello desde la prensa, otros desde partidos políticos, otros desde el ejercicio al voto; otros desde las huelgas, la filantropía o el fortalecimiento de una economía empresarial. Otros pasamos a la acción civil y pedimos participación en la construcción de una democracia y una política cultural de base, cada vez más inclusiva y para beneficio de mayor cantidad de personas. Todos los frentes son buenos, si la meta es la misma: la justicia y el libre acceso a los bienes del país.

La cultura, por ejemplo, es un bien de este país que debe ser de todos. DE TODOS; no importa la raza, la clase , la nacionalidad, la preferencia sexual. Tampoco importa la ideología. Este último argumento lo esbozo con temor, lo confieso. No quisiera que se utilizara la cultura por la que tanto he trabajado en contra de mis ideales. Pero debo correrme el riesgo. Es más, invito a que todos nos corramos ese riesgo porque entiendo que así funciona la libertad. O es para todos o no sirve de nada.

Por estas razones y por más, el Festival de la Palabra es del pueblo de Puerto Rico. Ni siquiera es de su Junta de Directores, ni de sus auspiciadores; sino del pueblo de Puerto Rico. Estiramos cada centavo público y privado que recibimos. Quien quiera saber cómo se utilizan estos dineros, puede entrar en nuestra página web, en donde se encuentran nuestros estados financieros actuales a plena disposición de quien quiera revisarlos.

Le agradezco inmensamente la fe depositada en este Festival a la administración pasada. Puedo mencionar nombre por nombre a quienes nos prestaron valiosísima ayuda; pero la lista sería inmensa y este no es el propósito del actual mensaje. Ya hemos dado las gracias en cada comunicado de prensa, entrevista, programa y foro público por los pasados 3 años a cada uno de los responsables en la administración PNP en ayudarnos a hacer realidad nuestro Festival. Y hemos recibido críticas por ello. Sin embargo inisitimos en que el ejercicio de soñarse parte de un país con peso y presencia internacional exige el cumplimiento de un protocolo. Es uso y costumbre que los mandatarios de un país den la bienvenida y abran los actos internacionales del país. Estas presencias gubernamentales le dan oficialidad y son parte de la proyección internacional de Puerto Rico y de su literatura. Los protocolos casi siempre resultan incómodos de sobrellevar; sobretodo para seres tan desobedientes y dados a la libertad como lo son, por lo general, los escritores.

Pero el Festival de la Palabra tampoco es propiedad de los escritores nacionales ni internacionales. El Festival de la Palabra es del pueblo de Puerto Rico y para la proyección internacional y nacional de ese pueblo. La comunidad de escritores es su fuerza motora; pero no su dueño.

Aclaro que como el Festival de la Palabra es iniciativa de un sector de la sociedad civil- escritores, empresarios, maestros, libreros; me acercaré a la nueva administración a pedirle un apoyo similar o mayor. Debo hacerlo; es mi deber y responsabilidad para con el pueblo de Puerto Rico y con el Festival de la Palabra; para con los 5,000 estudiantes y maestros que llegaron a nuestros predios este año ávidos de nuevos instrumentos de enseñanza y nuevas experiencias de crecimiento y aprendizaje. Para las 20,000 visitas que recibimos en el Museo de Arte de Puerto Rico, las 40 escuelas que visitamos, desde Barrio Obrero y el Caño Martín Peña hasta en la Escuela Ecológica de Culebra, llevándoles escritores nacionales e internacionales; para los 2,000 estudiantes que impactamos en Nueva York. Por ellos, debemos acercarnos a la administración que esté en el poder y recibir su apoyo y ayuda.

Ya ellos decidirán si tenemos Festival de la Palabra en este próximo cuatrenio o no.

Me apena que el ambiente tribal/político de mi país y que la libertad de acción y de criterio que provee a sus servidores y cuidadanos obligue a esta aclaración.
Reitero sin embargo, que se hará las veces que sea necesario.



--


Mayra Santos-Febres
Directora Ejecutiva SLLAPR/FP
mayra.santosfebres@gmail.com
www.festivaldelapalabra.net
787-210-6799

viernes, diciembre 07, 2012

amputaciones 4 por Ana Maria Fuster


Sangre, catarsis y nirvana
gimen los verbos de mi poema
no hay paz para los cobardes
ni pan para los farsantes
mi alma recorre poemas y piel
como las manos de un beso puro
que mana salitre y escarcha
no hay palabras para la vergüenza
ni corazones amputados para mi destino

Ana Maria Fuster Lavin

(foto por Diego Epstein)




lunes, diciembre 03, 2012

Amputaciones 3

esos segundos derramados en el aire
no hay treguas, tan solo juegos vacíos
conjuros armados de mentiras
como amarrar la respiración de un muerto
otorgo la extremaunción a otro espejismo
y sigo mi camino 
 
Ana Maria Fuster Lavin
 

Amputaciones 2

El celular vibra deseos cobardes
clandestinas perversiones baratas
mi sangre urge la sangre
mis labios tienen hambre
y salen de cacería
cercenan, mutilan, truncan,
las palabras vacías, invisibles
los espejismos tras otra mirada
como los insomnios de la piel
 
Ana Maria Fuster